Cuentos Chinos se hundió hasta un preocupante 7% de audiencia y sin embargo mejoró como programa en su segunda entrega. Tal vez porque este martes el espacio de Jorge Javier Vázquez se pareció un poquito a Sálvame y copió más de El Hormiguero.
Pero también porque cambiaron las mil y una secciones del día del estreno por las mil y una noches de Bárbara Rey. A la postre y después de ser la protagonista del episodio, sabríamos que ahora trabaja para La Fábrica de la tele, o sea, para Mediaset, la cadena que todavía preside Borja Prado.
La visita de Bárbara Rey dinamitó la estructura presentada el lunes, desplazó a casi todos los colaboradores, y vertebró el espacio por completo. Ella siempre tiene su morbo, por muy sobado que esté ya su asunto con Juan Carlos de Borbón. "Hay que trabajar para todo el mundo pero siempre cobrando", admitió la que fuera mujer del domador Ángel Cristo, dando pistas de que ella no va gratis ni a la compra.
En marzo, hace seis meses, era una de las estrellas de Atresmedia gracias a la serie Cristo y Rey y acudió a El Hormiguero, donde habló con Pablo Motos de sus problemas con Mediaset. "Les puse una querella después de cinco años, tras llamarme prostituta, chantajista y de todo. La indemnización fue de 30.000 euros", dijo entonces en Antena 3, muy molesta. Sobre el veto que la cadena de Fuencarral había impuesto para que no hablaran de ella, se despachó a gusto en Atresmedia: "Ahora no me nombran, y es curioso: después de haber ido a un programa extraordinario, tanto por Risto (Mejide) como por mí, ya no tengo cabida en esa cadena", remató, recordando la buena audiencia de su actuación estelar en Viajando con Chester, producido por cierto por los creadores de Cuentos Chinos, ahora sus jefes.
A La Fábrica de la Tele le habrá encantado provocar al presidente de la compañía en la que emiten su invento, que había vetado la presencia de la vedette en sus platós, y más para hincarle el diente a la familia del Emérito, el mismo que confió sus ponzoñosas finanzas al padre de Borja Prado, enemigo público número uno de los padres del defenestrado Sálvame, operación de limpieza que atribuyen al ex presidente de Endesa. Sin embargo, escuchar a Bárbara Rey decir con su característica osadía que Doña Sofía "es una buena reina" escandaliza ya menos.
Más subversiva fue Bárbara Rey cuando disparó contra la corte de Ana Rosa Quintana en su palacio, lanzando un dardo a Lequio por aquello de reivindicar en pantalla, como recogimos, que "la única reina de las mañanas" es su jefa, frente a María Teresa Campos, en un tono muy subido y cuando la otra reina matutina estaba aún de cuerpo presente, horas después de fallecer.
Cuentos Chinos se pareció más a Sálvame en su segunda entrega porque se acorazonó. Y no solo por la presencia de la madre de Sofía Cristo sino porque incluyeron un repaso a noticias de famosos, como el juicio de Arancha Sánchez Vicario, comentadas por Bárbara Rey a su manera: "No voy a opinar del marido de Arancha pero no me ha caído nunca bien". También tuvimos el placer de volver a ver la detención del criminal que tocó el culo a una periodista en pleno directo, un suceso igualmente comentado por la invitada: "Si hubiesen metido en la cárcel a todos los que a mi me han…".
Quién va a durar más en Mediaset: ¿Bárbara Rey o Borja Prado?
El fichaje de Bárbara Rey representa otro sapo tragado por quienes promovieron al mismo tiempo un código ético y el veto, ahora levantado, de Bárbara Rey, la misma persona que el 13 de junio de 1997, se plantó en la oficina del distrito madrileño de Tetuán para denunciar al padre de Borja Prado, actual presidente de Mediaset, como autor del "robo de material sensible que perjudica a una alta personalidad del Estado", refiriéndose a vídeos y fotografías que habían sido sustraídos de su domicilio. Manuel Prado y Colón de Carvajal fue senador, diplomático, empresario y amigo personal, además de administrador privado, del rey Juan Carlos, que había tenido una intensa, larga e intermitente relación extraconyugal con la actriz que su hijo acaba de contratar.
Bárbara Rey dijo a la Policía aquella primavera de hace 26 años que alguien entró en su casa "en la madrugada del 9 de junio, notando el día 10 que personas extrañas habían entrado en el domicilio sustrayendo del mismo carretes fotográficos sin revelar, cintas grabadas de varios autores, una agenda personal, tres cintas de casete, cinco de vídeo, 20 diapositivas, todas ellas comprometedoras".
Añadía en la denuncia que sospechaba que "las personas autoras de este hecho habían podido ser mandadas a su domicilio con el fin de retirar toda la documentación comprometedora para dicha persona por el señor Manuel Prado y Colón de Carvajal". Pedro J. Ramírez llevó a portada de El Mundo el titular "Bárbara Rey denuncia a Manuel Prado por el robo de documentación comprometida". La pregunta es quién va a durar más en Mediaset: ¿Bárbara Rey o Borja Prado?
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