Bertín Osborne frenó este lunes su caída en Telecinco con la visita de Pocholo Martínez Bordiú a su programa, Mi casa es la tuya. La entrevista mejoró unos resultados que empezaban a ser catastróficos para un canal de la envergadura de Telecinco. Sin embargo, no es suficiente.
El programa anotó un 11,1% de share y 1.331.000 espectadores, lo que le permitió situarse por encima de los dos dígitos y del millón de espectadores. Qué menos. Es el segundo mejor resultado de una temporada que está siendo realmente mala para Mi casa es la tuya, pero siguió siendo la tercera opción de la noche, por detrás de Masterchef (15,1%) y Hermanos (13,8%).
A pesar de que Pocholo consiguió detener la sangría de audiencia, el programa de Bertín Osborne continúa en su peor momento y que necesita, más que nunca, un revulsivo que, a la vista de la actualidad, solo tiene un nombre: Ana Obregón. La presentadora se sentará próximamente con Bertín para hablar, por primera vez, de su hija/nieta después de haber llegado a España tras pasar dos meses en Miami. Esa entrevista será la prueba de fuego de Mi casa es la tuya, que se jugará su futuro en Mediaset a una sola carta.
La sangría de Bertín en la última temporada de 'Mi casa es la tuya'
Bertín Osborne arrancó la última temporada de Mi casa es la tuya con una entrevista que, en principio, era bastante atractiva: Jesulín de Ubrique. Esa entrega, sin embargo, apenas se conformó con un 11,2% de share, a pesar de que Sálvame calentó el estreno durante semanas con polémicas declaraciones de Belén Esteban. A la semana siguiente, Mi casa es la tuya se desplomó hasta el 8% con Nacho Cano y después cayó más con Fernando Verdasco (7,8%). Ese día también perdió el umbral del millón de espectadores (965.000).