Elena Sánchez tenía decidida la destitución de su jefe de Deportes por la presunta publicidad irregular que disfrutó la marca El Ganso durante el Mundial de Qatar. Pero el tsunami electoral del pasado domingo y el adelanto de las legislativas para el 23 de julio ha petrificado a los mandos. La cúpula directiva está agarrotada, como lo prueba el hecho de que Atresmedia se le adelantó 48 horas al ofrecerse como casa de los jugosos debates electorales que se avecinan, como el de Feijóo contra Pedro Sánchez.
Y es que la convocatoria sorpresa de elecciones generales puso de los nervios a la presidenta interina Elena Sánchez, demasiado ocupada como para organizar debates. Lo mismo le ocurre al director de Contenidos generales José Pablo López. Los nervios son la tónica general también entre los grupos mediáticos afines a La Moncloa, véase la renovación pendiente del Días de tele que produce LaCoproductora (integrada en el Grupo Prisa).
Cronología de un escándalo
RTVE invirtió 32 millones en comprar el polémico Mundial de Qatar de fútbol pero apenas ingresó 1,1 millones de euros en patrocinios, tras las restricciones de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia a que emitiese publicidad de marcas que no estuvieran ligadas a los escasos patrocinadores del evento organizado por FIFA.
Sin embargo, TVE se volcó en dar visibilidad a la marca de ropa madrileña El Ganso, que vistió a periodistas y muchos de sus comentaristas durante la emisión de encuentros que tuvieron picos que sobrepasaron los 13 millones de espectadores.
Después llegaron los problemas: la apertura de un expediente por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, la presentación de una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción y el encargo del Consejo de Administración de RTVE de un informe interno que certificó que existió "publicidad encubierta" en favor de la marca textil de los hermanos Alonso y Clemente Cebrián.
El escándalo removió los cimientos de la cúpula de RTVE, atónita tras comprobar que el departamento comercial de la Casa desconocía el acuerdo con El Ganso porque este área atribuía las acciones a un simple intercambio de ropa por visibilidad, negociado directamente por el área de Deportes.
Su máximo responsable desde enero de 2020, Arsenio Cañada, aseguró que su número dos, Javier Grima, había cerrado un acuerdo verbal con El Ganso similar al que se había cerrado ante otros eventos previos como Olimpiadas o Eurocopas.
Pero el informe de RTVE, tal y como señalan fuentes de la Corporación pública a Informalia, certifica que no se respetaron los procedimientos, tal y como sí se hizo en las Olimpiadas de 2016, y subraya que ni Cañada ni Grima tenían atribuciones para cerrar acuerdos de este tipo.
Elena Sánchez tenía previsto destituir a Cañada como "máximo responsable de permitir el acuerdo con El Ganso", pero el adelanto electoral para el 23 de julio ha contaminado la capacidad ejecutiva de la presidenta al frente de RTVE, maniatada ahora para tomar decisiones drásticas.
La directiva desveló en la Comisión de seguimiento a RTVE del Congreso y Senado de marzo que había pedido a Arsenio Cañada que dimitiera como jefe de Deportes tras certificarse que permitió un acuerdo para el que no tenía competencias. "Las instituciones públicas tenemos presunción de licitud en nuestro trabajo y como contrapartida una mayor exigencia de transparencia y honestidad además de la ineludible exigencia legal a todos nuestros comportamientos profesionales. Así, en ocasiones los profesionales deberíamos dar un paso al lado para facilitar las investigaciones aclaratorias de todo lo ocurrido y preservar la dignidad y credibilidad de la corporación, todo ello sin limitar la presunción de inocencia", aseguró.
En abril, Elena Sánchez admitió que, tras la negativa de Cañada a irse, intentó que el Consejo de Administración de RTVE debatiera imponer su relevo. "Creí imprescindible para la buena marcha de la casa hacer un cambio en el equipo de Alta Dirección que, desde mi punto de vista, era y es perentorio. Al plantearlo a los miembros del Consejo, tuve el convencimiento de que no tuve con la aquiescencia ni tan siquiera para su mera propuesta", afirmó Elena Sánchez.
Mal ambiente
La eliminación de la tertulia de Estudio estadio, la decisión de relevar a Juan Carlos Rivero como narrador de la Selección Española, algunas quejas procedentes de la Real Federación Española de Fútbol por el tratamiento que ha recibido la Copa del Rey en La 1, y las críticas sindicales por el supuesto ambiente tóxico que reinan en el área de Deportes de RTVE han colocado en mal lugar a Cañada.
Éste ha recibido críticas desde Comisiones Obreras. El sindicato protestó por "el daño reputacional que está sufriendo el área de Deportes de TVE", a Vox, que a través del diputado Manuel Mariscal señaló a Cañada y Grima "como responsables de la decadencia de la sección".
No es la primera vez que Grima es criticado a nivel interno en RTVE. El actual subdirector de Deportes y director de Teledeporte se marchó en 2014 a Movistar Plus tras la compra de Telefónica del Mundial de motos tras arrebatárselo a la pública. El entonces presidente de RTVE, Leopoldo González Echenique, aseguró que la persona que gestionaba los derechos (Javier Grima) se había ido "a la competencia, conociendo la capacidad de negociación y de puja económica que tiene la Corporación RTVE, por lo que dispondrá de ventaja a la hora de ofertar por los distintos derechos deportivos".

Futuro incierto
Elena Sánchez había movido ficha en las últimas semanas para encontrarle sustituto a Arsenio Cañada, pero la veterana y reputada Paloma del Río rechazó la propuesta. La falta de sustitutos obligó a la presidenta de RTVE a aplazar su decisión hasta pasadas las elecciones municipales y autonómicas del 28M, evitando generar polémicas en plena campaña.
El actual jefe de Contenidos informativos de RTVE, Josep Vilar, "se ha desentendido del asunto", según fuentes internas. Villas es el jefe directo del actual responsable de Deportes de la Corporación pública, Arsenio Cañada, que intentará salir vivo del tsunami.