Televisión

'Harry y Meghan', una declaración de guerra en dos asaltos: lo más fuerte llegará en los tres capítulos finales de Netflix

Hasta los corgis que sobrevivieron a Isabel II estaban nerviosos ante el estreno de Harry y Meghan, la docuserie que amenaza con reventar las costuras de la familia Windsor cuando ni siquiera se han cumplido cien días de la muerte de la Reina. Pero los tres primeros capítulos que ya están en Netflix -los otros tres llegarán el próximo jueves- tan solo han sido un pequeño seísmo que apenas ha rozado a la familia real británica contra la que supuestamente van a cargar dentro de unos días.

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Los duques de Sussex hablan desde su mansión en Montecito (California) sobre una historia de amor que comenzó en Instagram. Harry vio una foto de Meghan y quiso conocerla. A ella, que dice que no sabía quién era el príncipe de Inglaterra, le bastó con revisar las fotos que tenía en su perfil de esa red social para saber que ese chico era interesante como para cerrar una primera cita en el Soho de Londres. Así comienza una relación que ellos rememoran compartiendo frases repletas de lugares comunes, anécdotas, fotos -abusan del blanco y negro- o mensajes de móvil. Recursos de comedia romántica.

Racismo y prensa: los Sussex pasan al ataque

A lo largo de los tres primeros capítulos, Harry y Meghan intentan pulir su perfil filantrópico y justificar la decisión que tomaron en 2020 de apartarse de la familia real (Megxit). Lo hicieron para salir del foco y llevar una vida privada, aunque su presencia en los medios no ha cesado. Primero concedieron una exclusiva a Oprah Winfrey y ahora han firmado un contrato -dicen que 100 millones por varios proyectos- con Netflix. Dieron portazo a Buckingham por la brutal campaña de acoso que habría recibido Meghan desde que cambió su papel en Suits por el de duquesa. Ataques machistas, clasistas y, sobre todo, racistas por parte de la prensa sensacionalista, que es la que se lleva todas las embestidas de los duques. "Lo hice para proteger a mi familia después de lo que le pasó a mi madre", dice Harry en una de las numerosas -probablemente demasiadas- referencias a Lady Di.

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Se espera que en la traca final carguen contra su familia y el escaso apoyo que encontraron en la rígida maquinaria de palacio. "Nadie sabe todo lo que pasó. Nosotros sí", enfatiza Harry mirando a cámara. Los corgis permanecen atentos.

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