Ucrania, que lucha desde hace cerca de tres meses contra la invasión de Rusia, ha ganado el Festival de Eurovisión 2022, una victoria que tiene una lectura inequívoca: el mensaje de los espectadores del certamen de música más importante de Europa, y uno de los más relevantes de todo el mundo, ante la dramática situación que está viviendo el pueblo ucraniano.
El triunfo de Ucrania no es ninguna sorpresa si tenemos en cuenta que la candidatura de este país llevaba semanas en o más alto de los rankings que elaboran las casas de apuestas. Por debajo estaban Italia, Reino Unido, Suecia y España. Sin embargo, esa posición tan destacada ha sido muy criticada (la victoria también lo será) por quienes consideran que las votaciones deberían ceñirse solo a lo estrictamente musical y no por el contexto político o social.
Ucrania ha ganado con 631 puntos, seguida de Reino Unido (466), España (459) -el mejor puesto en 27 años-, Suecia (438) y Serbia (312). Para el triunfo de Ucrania ha sido determinante el voto de los espectadores (no del jurado), empujados por un sentimiento de solidaridad imparable, aunque las cuestiones artísticas y musicales hayan quedado a un lado.
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Ucrania ha conseguido la victoria con el grupo Kalush Orchestra, que mezcla rap y folclore, y la canción Stefania, un tema dedicado a la madre del líder del grupo, Oleh Psiuk, que se ha convertido en una especie de himno por la situación actual que vive el país. Kalush Orchestra, sin embargo, no eran los candidatos de Ucrania inicialmente. Quedaron segundos en la selección que organizó este país, pero la ganadora, Alina Pash, renunció después de la polémica desatada por un viaje que había hecho a la península de Crimea cuando Rusia se la anexionó en 2015. Además, se difundieron unas imágenes en las que aparecía con un jersey que llevaba unas franjas rojas y azules, como la bandera de dicho país. Finalmente, renunció a representar a Ucrania.
Así ha salpicado la guerra en Ucrania al festival de Eurovisión
Todo esto ocurrió justo antes de estallar la guerra. Después, se produjeron los primeros movimientos internacionales que se tradujeron en forma de veto a Rusia. En el caso de Eurovisión, la UER decidió expulsar a este país como castigo por la invasión. "La UER es una organización apolítica de emisoras comprometidas con la defensa de los valores del servicio público", explicó entonces los organizadores del certamen, cuyo objetivo, según manifestaron, es "llevar a cabo un intercambio y entendimiento internacional, reunir a la audiencia, celebrar la diversidad a través de la música y unir a Europa en un escenario".
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Para Ucrania es la tercera victoria en Eurovisión en su corta trayectoria en el festival. Debutó en 2003 y un año más después ganó con Ruslana (2004). Más tarde, en 2017, volvió a triunfar con Jamala, quien precisamente cantó un tema inspirado en la deportación de los tártaros de Crimea. La artista, por cierto, tuvo que huir del país cuando Putin envió a sus tropas y relató su calvario a través de las redes sociales.