La entrevista que Rosa López concedió hace unas semanas a Jordi Évole generó un notable revuelo por la reflexión que hizo del éxito que cosechó en Operación triunfo, la forma en que lo gestionó y las consecuencias que tuvo, más allá de la comentada anécdota de su lugar de procedencia, que no era Armilla, el popular pueblo de Granada en el que supuestamente vivía antes de saltar a la fama.
Una de las cosas que dijo a Évole era que la gente votó por ella "por pena" cuando participaba en el talent show. "Se me ha acercado mucha gente a decirme que no", ha dicho sobre una entrevista en la que considera que algunas cosas no se explicaron bien. "Hay cosillas que no han salido, positivas, que explicaban eso. Eso está dicho desde una Rosa llena de inseguridades, hace 20 años, ahora con mis 41 años lo que procuro es quitarle importancia, intento llevar la vida lo más natural posible porque si hay algo claro en la vida es que hay que ser felices".
Lea también: "He tenido a España engañada": Rosa López ya habló de la "mentira" de Armilla con Bertín Osborne
Rosa también habló en la entrevista sobre los problemas económicos y la falta de apoyo que había tenido en aquellos momento, cundo se convirtió en una de las personas más populares del país. "Eso fue un refritillo", apuntó. "Vivimos en una vida que contantemente, lo mismo es en directo, con sus fallos y todo, y es perfecto, pero es verdad a veces se editan las cosas y a lo mejor quedan bonitas, pero no quedan las cosas positivas que querías", dijo tras su paso por Lo de Évole.
Lea también: Rosa López sufre un aparatoso accidente durante su entrevista con Jordi Évole: "Hostia puta, ¿te has quemado?"
"Yo no me arrepiento de nada en la vida, hasta de los fallos", dice sobre la entrevista. Tampoco, afirma, le molestó lo que dijo Manu Tenorio, su compañero y gran amigo en la academia de OT, sobre sus problemas económicos que se habrían solucionado "con un gestor en condiciones".
Relacionados
Comparte esta noticia
