La 93ª edición de los Premios Oscar se celebró íntegramente de modo presencial, aunque cumpliendo con las restricciones del Covid-19 para evitar contagios. Aunque tan solo pudieron asistir a la ceremonia los nominados y los encargados de entregar las estatuillas, la alfombra roja del Dolby Teathre de Los Ángeles se inundó de glamour como cada año.
Amanda Seyfried, de Armani Privé. La nominada a Mejor Actriz de Reparto por Mank no se llevó la estatuilla pero si acaparó todas las miradas con su espectacular vestido rojo de tul con pronunciado escote en V y corte sirena.

Carey Mulligan, de Valentino Alta Costura. Partía como una de las favoritas a alzarse con el Oscar a Mejor Actriz por su papel en Una joven prometedora, pero finalmente Frances McDormand le ganó la partida por Nomaland. Se decantó por un dos piezas en color oro - a juego con la estatuilla - compuesto por un top estilo bandana y una voluminosa falda de lentejuelas de Valentino.


Maria Bakalova, de Louis Vuitton. La búlgara, nominada a Mejor Actriz Secundaria por Borat, apostó por un vestido en color blanco con pronunciadísimo escote en uve y falda de tul, que combinó con un discreto moño bajo y unos impresionantes labios rojos.

Margot Robbie, fiel a Chanel. La estrella de Hollywood triunfó una vez más con un elegante modelo metalizado con pequeñas flores. Un vestido joya hecho a mano para el que se necesitaron más de 200 horas de trabajo. La actriz sorprendió además con su nuevo look: un flequillo largo que ha despertado un sinfín de críticas positivas.

Andra Day, de Vera Wang. Nominada a Mejor Actriz por The United States vs. Billie Holiday impactó con un imposible modelo de malla dorado con estratégicas aberturas, con el que parecía emular a la propia estatuilla que no se llevó.

Zendaya, de Valentino. La joven actriz de 24 años no estaba nominada por Malcolm and Marie pero se convirtió en la más elegante de la noche en su papel de entregadora de premio. Desafió a las supersticiones y se enfundó en un espectacular vestido amarillo. El diseño cuenta con un gran corte en forma de U en el abdomen.

Laura Dern, de Oscar de la Renta. Entregó el Oscar a Mejor Película Internacional y fue de las pocas que eligió el negro en la gran noche del cine. La veterana actriz eligió un diseño con cuerpo negro, manga larga y cuello cisne, que combinó con una falda de plumas blancas. Menos es más.

Halle Berry, de Dolce & Gabanna. Con nuevo e impactante corte de pelo (un bob muy corto con flequillo cortina), apostó por un vestido en color malva, con escote corazón y enorme lazo en la cintura. La protagonista de Catwoman, posó con su novio, el cantante Van Hunt, y entregó los dos primeros galardones para Mank, el de Mejor diseño de producción y Mejor fotografía.

Reese Witherspoon, de Dior. Tan correcta como acostumbra en las grandes citas, la actriz se convirtió en una de las más sobrias de la alfombra roja, con un elegante vestido de escote asimétrico, cinturón negro para marcar cintura y falda plisada en colores rojo y burdeos.

Laura Pausini, de Valentino Alta Costura. La italiana, nominada por Mejor canción original por La vida por delante, fue una de las más elegantes de la noche gracias a su diseño en color negro con escote barco y falda evasé.

Emerald Fenell se alzó con la estatuilla a Mejor Dirección por Una joven prometedora. La directora, embarazada de su segundo hijo, apostó por un vestido de gasa con volantes y estampado floral en tonos verdes y violetas.
