La cantante Madonna ha comenzado el año con una nueva imagen que ha revolucionado las redes sociales y esta vez no tiene que ver con sus ojos, pómulos ni labios. Se trata de su trasero, donde luce unas prótesis al estilo Kardashian que ha dejado a sus fans boquiabiertos. Ella ni confirma ni desmiente haberse puesto implantes pero sí se defiende de los ataques: "No busco la aprobación de nadie. Tengo derecho a disponer de mi cuerpo como todo el mundo", ha dicho.
La imagen corre como la pólvora por las redes sociales y pertenece al concierto que la artista ofreció el pasado día 1 en el pub Stonewall Inn, uno de los bares gays más icónicos de Manhattan. Allí, vestida con un pantalón negro y una chupa de cuero repleta de cadenas, mostró una retaguardia clavadita a la de Kim Kardashian gracias a unas prótesis que no han gustado demasiado a sus seguidores.
Did Madonna get butt implants???? ???????? https://t.co/ckxtaYwaXL pic.twitter.com/ZhWEfK6PCl
Perez (@ThePerezHilton) 2 de enero de 2019
Ante la polémica generada, Madonna (60) ha querido dar la cara para lanzar un claro mensaje a todos sus detractores: "No busco la aprobación de nadie. Tengo derecho a disponer de mi cuerpo como todo el mundo", ha dicho, acompañando su texto de los hastag "Libertad", "No discriminación" y "Respeto".
La cantante subió al escenario con un compañero de excepción, su hijo David Banda, que a sus 13 años ya es tan alto como su madre. Juntos cantaron 'Like a Prayer' o 'Can't Help Falling in Love', de Elvis Presley. Madonna está muy unida a sus seis hijos, con los que celebró Acción de Gracias el pasado mes de noviembre.