Sin perjuicio de que sus dos bodas (la que viene este 8 de diciembre y la civil de agosto) sean sin duda los días que más regocijo traigan a la ex de David Bisbal y los que recuerde para siempre, sus despedidas de soltera también fueron muy felices. Elena Tablada ha tenido varias despedidas de soltera, que sepamos. Y la primera de todas la vivió incluso sin que se casara de verdad, en el año 2003, en Miami. Fue una despedida de soltera entre comillas, antes de irse a vivir con el almeriense que con los años se convertiría en padre de su hija.
En aquella ocasión, un stripper de color hizo las delicias de la joven, como recogió alguna portada de la época. Elena, a sus 24 años, lo daba todo durante una noche muy, muy, muy loca en una discoteca de Miami, donde residía. Fue tal el momento on fire de Tablada que el boy (un portoriqueño llamado Rico) de las fotos, con el que aparecía en actitud muy divertida, apareció en un programa de televisión para contar que su historia con la ya famosa novia de Bisbal fue más lejos. Como anécdota, contar que Elena Tablada demandó a la productora del programa Dónde eestás corazón, que pertenecía a Ana Rosa Quintana, perdió el juicio, y acabó condenada a pagar las costas, 16.000 euros.
No hay que remontarse mucho para regresar a las últimas despedidas, las más recientes. El verdadero 'resacón en Las Vegas' de Tablada fue en Oporto, a donde viajó en septiembre una vez era ya formalmente la señora de Ungría pero cuando aún o había santificado su unión ante Dios, sacramento que cumplirá este sábado. A la ciudad del norte de Portugal viajó junto a sus amigas más íntimas. Fue según cuentan desde su entorno una despedida sonada, don todas disfrazadas de Minnie y otros detalles que no vamos a contar aquí porque así nos lo han pedido.
Después, ya en octubre, justo cuando se conoció que David Bisbal iba a ser padre por segunda vez, la diseñadora disfrutado de su bachelorette en Tenerife. Rockin' hard, escribió Elena en su primera publicación en la isla. El Hard Rock Hotel de Tenerife fue el lugar que han elegido para disfrutar de unos días de playa, piscina y la celebración de despedida. Con un conjunto de color gris, unas botas negras y subida en un cajón del propio hotel, Elena daba la bienvenida a los días que la esperaban.
La despedida incluyó momentos disfraz. El más llamativo fue aquel en el que se vistió novia. Elena posaba con un bañador con la tripa al aire, pero unido por los laterales, con la parte de abajo de color blanco y la parte superior de color mostaza. Y en la cabeza, iba tocada con un velo corto con un detalle original: una gorra blanca, como una novia rapera. "Bride and best squad", escribía la señora de Ungría. El viaje lo hizo junto a sus amigos y su hermana Naelé.
En su segundo look de despedida, Tablada llevaba una flor en el pelo, que llevaba recogido en un moño y otro bañador diferente. "Un poquito de spa… para nivelar el Ph", escribía en una foto en la que posaba debajo de la ducha. En todas las fotos del viaje, un mismo hashtag: 'all i need' (todo lo que necesito).
Y más gadgets para el momento despedida: una peluca azul y una diadema de unicornio era el look con el que Tablada salió a disfrutar de la noche de Tenerife: "Por mi despedida fui a m***** F*****", escribía la diseñadora. La despedida acabó poniéndose muy loca, de acuerdo con el testimonio gráfico que dejó: "Resumen gráfico de la mejor despedida", escribía una de sus amigas junto a una foto en que la no todos llevaban ropa en la piscina.
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