Vox irrumpió el pasado domingo con fuerza en el mapa político andaluz tras lograr 400.000 votos, traducidos en 12 diputados, en las elecciones de Andalucía. La alegría era inmensa en su líder nacional, Santiago Abascal (42), que lució sonrisa de oreja a oreja y celebró los resultados con sus seguidores en su sede del Hotel Ayre de Sevilla. El político vasco también festejó el resultado en las redes sociales, donde su mujer, Lidia Bedman (33), es más popular que él.

La esposa de Abascal acumula más de 124.000 seguidores en Instagram, casi el doble que su esposo. Comparte sus looks, sus rutinas de belleza, su estilo de vida saludable y algunos consejos como madre de dos niños, Jimena y Santi, fruto de su relación con el jefe de VOX. Lidia, eso sí, no publica imágenes con su marido en la red social, ni siquiera para felicitarle por lo conseguido.

Prefiere marcar cierta distancia con su vida íntima y emplear su cuenta de Instagram de la forma más profesional posible, si bien es cierto que también publica alguna que otra imagen cotidiana de sus hijos: "Simplemente me defino como una mamá que trata de hacer lo mejor posible para su familia", dice sobre ella misma en IG.

Asentada como influencer e instagrammer de referencia, Lidia estudió Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad católica San Pablo CEU, y protagonizó una breve incursión en la política de la mano de su marido. En 2015, Lidia se presentó en las listas a la Asamblea de Madrid por Vox, pero la formación se quedó sin escaño.
Tres años después de aquello, este mismo verano, Bedman y Abascal se dieron el "sí quiero". Se trataron de las segundas nupcias para el político, que se divorció en 2010 de su primera mujer, con quien tiene otros dos hijos. Según contó a El Mundo, mantiene una excepcional relación con ella. Por cierto, el primer matrimonio de Abascal fue civil. Fue Bedman quien le hizo comparecer ante Dios y la iglesia, eso sí, después de tener a dos hijos en común y convivir varios años 'en pecado'.
