Vuelve a casa por Navidad Marta Gayá, la mallorquina que fue el gran amor de don Juan Carlos y hoy una de sus mejores amigas. Después de que salieran a la luz las conversaciones de Corinna con el comisario Villarejo y Juan Villalonga, la Socialité se hizo todavía más discreta e invisible de lo habitual.
Este verano pasó apenas unas pocas semanas en Mallorca con escasa vida social en actos públicos. Navegó casi a diario en su barco rodeada de amigos fieles y aunque algún medio difundió que había viajado a Grecia, donde habría coincidido con don Juan Carlos en una isla privada, lo cierto es que la guapa mallorquina sólo se movió entre Palma y su casa e Suiza.
Y allí es donde está desde hace dos semanas, en una casa que alquila todo el año, en un pueblecito cerca de Gstaad. Es mayor que la anterior y al parecer está decorada con buen gusto y muy confortable.
Marta pasó octubre y parte de noviembre en Palma pero regresará a la isla en Navidad ya que su madre es muy mayor y se ha quedado viuda no hace mucho tiempo. Después volverá a Gstaad donde la jet set internacional prolonga la temporada invernal hasta casi el mes de marzo.