Las palabras que dedicó don Juan Carlos a su esposa durante la celebración de su 80 cumpleaños emocionaron a todos. Por encima del regalo que doña Letizia le hizo a su suegra, de saludar afectuosamente a la infanta Cristina, y compartir mesa con su cuñada, estuvo el gesto del emérito hacia la homenajeada.
El Rey don Juan Carlos agradeció a la madre de su hijos su extraordinario comportamiento a lo largo de su vida familiar y su reinado. Era un pequeño discurso de reconocimiento a sus méritos y su paciencia ante todos los desplantes sufridos a lo largo de sus 56 años de casados.
Por su parte, doña Sofía llevaba escritas en un papel sus palabras, que sorprendieron y emocionaron cuando agradeció la suerte de haber sido reina de España y lo "feliz" que había sido con sus hijos y su "queridísimo marido" (sic). Luego resumió en inglés su pequeño discurso para los comensales que no hablaban español. La reina apagó las velas y los invitados cantaron el Cumpleaños Feliz en español y luego en inglés, para que la reina Noor de Jordania, el director de orquesta Zubin Mehta, el rey Constantino y Ana María de Grecia y la ex emperatriz de Irán Farah Diba pudieran unirse al coro.
No hubo sobremesa. Algunos tenían cosas pendientes de trabajo. Otros, como los eméritos y sus amigos, debían cambiarse para asistir al concierto en honor de doña Sofía en la Escuela Superior de Música creada por Paloma O'Shea, la viuda de Emilio Botín.
Doña Sofía ha comentado estos días con periodistas que empieza una etapa en su vida en la que va a dedicarse a algo que le apasiona y le preocupa: el medio ambiente y la contaminación de los océanos. La reina emérita por tanto empieza una nueva etapa en su vida. No es una jubilación pero por fin puede entregarse de lleno a las cosas que realmente le interesan y le motivan.
