La periodista ha confesado este martes haber sido víctima de abusos sexuales cuando era una niña y, a pesar de que ha bloqueado muchos de aquellos recuerdos, señala al culpable como uno de los amigos de su padre: "Él me decía que no lo contara a nadie. Que era nuestro secreto".
En la era del #MeToo, Nieves Herrero (61) se ha sincerado durante una entrevista al diario Público en la que habla de los abusos a los que fue sometida cuando apenas contaba con tres años de edad: "Sufrí abusos de un amigo de mis padres", ha confesado. "Dicen que no se tiene memoria y conciencia de las cosas hasta los cinco años, pero yo recuerdo todo perfectamente. El cerebro no te engaña y te lo recuerda. Hasta que prefieres olvidarlo para evitar el daño".
La periodista sitúa los hechos entre sus 3 y 5 años: "Yo no comprendía nada. No comprendía lo que pasaba, pero me escondía cada vez que lo veía llegar. Él me decía que no lo contara a nadie. Que era nuestro secreto".
Afirma que aún tiene recuerdos de aquellos momentos: "De ese amigo, que por supuesto dejó de serlo en cuanto mis padres se enteraron, recuerdo sus manos y sus cosquillas. Sus cosquillas que no tenían que existir porque llegaban donde no tenían que llegar". Y añade: "No hay derecho a que te roben la infancia de esa manera. No hay derecho a que lo más bello del mundo que es ser niña te lo estropeen de esa forma".
Unos hechos terribles cuyas consecuencias le han acompañado durante toda su vida: "Cada vez que se me acercaba un hombre me ponía una coraza. Me acordaba de él y reaccionaba así. Me convertí en una desconfiada. No soporto cuando me cogen y noto ciertas intenciones. Me pongo a la defensiva". Y, sobre todo, aprendió a proteger a sus hijas para que no sufrieran lo mismo que ella: "Yo siempre les decía a ellas cuando eran pequeñitas que tuvieran cuidado con esas manos de plomo que molestan y que te hacen sentir miedo. Con los niños siempre estoy alerta. Los veo muy vulnerables. Me hice detectora de estos hombres de intenciones oscuras".denunciar y visibilizar un enorme problema de nuestra sociedad que tenemos que cortar de lleno
La presentadora ha querido romper su silencio para liberarse de la carga que le ha acompañado toda su vida y para lanzar un mensaje: "Por muy duro que sea lo que nos pase creo que el ser humano tiene la capacidad de seguir adelante, de no sentirnos culpables".
La periodista, que se divorció del productor Ángel Moreno en 1998, volvió a dar el "sí, quiero" en 2013 al periodista Guillermo Mercado. Tiene dos hijas, Blanca y Ana, fruto de su primer matrimonio.
