La que fuera mano derecha de Mariano Rajoy y ex vicepresidenta del Gobierno ha anunciado este lunes que deja la política para "emprender otra etapa" de su vida y con el convencimiento de que es lo mejor para su familia. A sus 46 años, Soraya Sáenz de Santamaría dice adiós y ahora se dedicará plenamente a los suyos, su marido, Iván Rosa Vallejo, y su hijo, el pequeño Iván.
Ellos son quienes siempre le han apoyado, sobre todo en estos últimos complicados meses en los que ha visto cómo su jefe y gran protector Rajoy perdía el cetro de poder ante la moción de censura de Pedro Sánchez. La derrota ante el socialista fue el preludio a un nuevo varapalo: el fracaso de su candidatura a presidir el PP tras la salida de Mariano. Pablo Casado le ganó la partida y este mismo lunes, Soraya se reunía con él para anunciarle su marcha.
Os adjunto el comunicado en el que anuncio, tras entrevistarme con nuestro presidente @pablocasado_, mi salida de la actividad política.
— Sáenz de Santamaría (@Sorayapp) 10 de septiembre de 2018
Siento una gratitud profunda. Ha sido una experiencia impagable, en la que he intentado dar lo mejor de mí misma al @PPopular y a los españoles pic.twitter.com/vsECrvuass
La abogada del Estado cierra así una etapa de su vida y asegura que lo hace por el bien de su familia. Consciente de que su importancia en el partido iba perdiendo fuelle, Sáenz de Santamaría, de memoria tan prodigiosa como la de su ex jefe Rajoy, prefiere retirarse de la esfera pública para volcarse en su esposo y su hijo, con quienes reside en un chalet de Fuente del Berro, en Madrid, muy cerca de la residencia de la Infanta Elena. La casa tiene varias plantas y una superficie de 231 metros cuadrados sin apenas jardín pero con una pequeña piscina.

Soraya e Iván Rosa, también abogado del Estado, siempre han llevado su relación con suma discreción y no son dados a aparecer juntos públicamente. Se conocieron en 2002 y se casaron por lo civil en 2005 y en Brasil, donde Iván, de padre portugués, tiene algunos parientes. A lo largo de su relación, él ha preferido mantenerse en un segundo plano y dejar que los focos apunten a su esposa.
Al igual que Sáenz de Santamaría, Iván Rosa también tiene un currículum envidiable. Trabajó en la Comisión Europea como experto en temas comunitarios y de cooperación judicial internacional, fue consejero de Justicia en la Representación Permanente de España en la Unión Europea y, desde 2012, es asesor jurídico de la división internacional de Telefónica.
Un año antes, en 2011, nació Iván, el único hijo del matrimonio. El bebé llegó con un pan bajo el brazo, ya que las elecciones de 2011 consagraron a su madre como vicepresidenta del Gobierno. En aquel momento, decidieron que fuera Iván quien se ocupara principalmente del niño. Ahora, las tornas cambian y será Soraya quien tenga todo el tiempo del mundo para ocuparse de los suyos. ¡Cómo cambia la vida!