La Familia Real realizó este domingo su tradicional posado en Palma de Mallorca, que este año cambió de ubicación y tuvo lugar en los jardines del Palacio de La Almudaina. Pero no ha sido la única tradición que se ha cambiado, ya que la Reina ha lucido vestido por primera vez desde que su marido está en el trono.

Así, Letizia dejó a un lado las camisetas de rayas, pantalones blancos o blusas lisas de anteriores años y se decantó por un vestido de lo más ibicenco que encajaba con los que llevaban Leonor y Sofía. El diseño de Hugo Boss, una de sus firmas de cabecera, era del todo crudo sin margas, detalles calados y falda midi evasé, que potenciaba su bronceado.

El vestido está disponible en la página web del modisto. Se trata del modelo Dafalia, está realizado en algodón y con un bordado inglés. Su precio es de 239 euros actualmente, ya que se encuentra rebajado, dado que en plena temporada se lanzó al mercado por 399 euros.

Para complementar el estilismo, Letizia eligió un bolso de mano de Carolina Herrera, alpargatas de cuña en tono beige atadas al tobillo mediante cintas del mismo tono de la casa española Mint and Rose cuyo, de 114 euros, y pendientes de brillantes en forma de estrellas de la maison francesa Chanel.


Felipe y Letizia se mostraron muy atentos con sus hijas en los minutos que duró el posado. Además, la princesa Leonor y el rey Felipe contestaron a algunas preguntas de los medios, entre ellas cómo se encontraba el ausente rey Juan Carlos: "Bueno, está fastidiado, porque quería venir, pero los médicos le han recomendado no moverse mucho. Le estaba cogiendo gusto a la actividad", comentó el monarca.

Asimismo, Felipe desveló que aunque la princesa Leonor viajará el próximo 8 de septiembre a Asturias, pero su presencia en los Premios Princesa de Asturias aún tendrá que esperar. "Ya veremos. Pero, de momento, este año no",explicó. Por último, Leonor confirmó que su estancia en un campamento de Estados Unidos fue "muy divertida" y que hicieron "mucho deporte".
