Los duques de Sussex han acudido este jueves al torneo de polo benéfico organizado en el Real Club de Polo de Berkshire, situado en el mismo condado en el que se casaron el pasado mes de mayo. El príncipe Harry compitió con el polista argentino Nacho Figueiras y su esposa quiso recompensar su esfuerzo con un beso de tornillo muy poco protocolario.
Pero el beso no fue la única sorpresa del día. La estadounidense sorprenció con un vestido vaquero de Carolina Herrera que ha convertido al denim en el nuevo tejido 'royal'.
No hay un día en el que Meghan Markle (36) asista a un evento y no sea el centro de atención, por lo que este jueves no iba a ser menos. La ex actriz acudió junto a su marido a un torneo de polo en el que se recaudan fondos para la fundación que el príncipe Harry (33) tiene en África. Llegaron acompañados por el polista Nacho Figueras y su mujer, Delfina Blaquier, amigos del duque.
Para el evento, la duquesa estrenó un original vestido de corte años 50, manga corta y con un cinturón ancho ceñido a la cintura de la colección resort de Carolina Herrera, valorado en más de 2.000 euros.
Ha combinado su look con unas gafas de sol de la misma firma, unos zapatos en tono nude de Aquazzura y un bolso de mano de ratán de J.Crew disponible por 49 euros.
Lo que más llamó la atención del conjunto ha sido su tejido denim, con el que también se ha visto a doña Letizia (45) este mismo jueves en un acto en Oviedo. La Reina de España eligió un estilismo muy similar al de Markle, aunque el suyo estaba firmado por Hugo Boss.
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