La ex vocalista de La oreja de Van Gogh ha sufrido en los últimos meses el azote de la crítica. Primero por su cambio físico y después por el nivel de sus actuaciones, lo cierto es que la cantante ha recibido multitud de críticas y acusaciones desde los medios y las redes sociales. Ahora toma la palabra y responde a sus críticos.
"Se me ha sacudido con saña y en lo personal. Lo que he sufrido ha sido acoso, puro bullying, una masacre", dice Amaia Montero, quien denuncia los ataques recibidos por su físico: "En este país, engordar es lo peor que puedes hacer. Estuve un tiempo apartada preparando el disco y, cuando reaparecí, todo el mundo se puso a hablar de mi cambio físico, de mi transformación facial. De que he cumplido años, vamos. Me han caído por todos los lados", señala durante una entrevista a El Mundo.
La cantautora también se refiere a las situaciones "machistas" que se dan en la actualidad y de las que habla en su nuevo trabajo Nacidos para creer: "Si un chico no está casado a los 40 a nadie le parece mal: "Mírale qué listo, qué bien se lo ha montado". Pero en una mujer les parece que implica cierto fracaso. Es un machismo absoluto. Yo no me he casado porque he estado haciendo otras cosas y no se ha dado. Punto. Ojalá el 8M sirva para que se nos valore por nuestras aptitudes y no por nuestro físico o nuestras relaciones. Pero, por ahora, no ha cambiado demasiado".
En su charla con el medio, Amaia recuerda su actuación en Cantabria, calificada por algunos espectadores como "bochornosa y vergonzosa": "Sin entrar en detalles técnicos, todo falló. Yo no oía la batería. Empezamos a intentar arreglarlo sobre la marcha y cada cosa que hacíamos generaba un problema nuevo. Y las condiciones eran malas: estábamos bajo una lona, llovía. Era una movida muy grande, imposible de arreglar, pero como yo creo en el show must go on, pues tiré, tiré y tiré hasta que ya fue insostenible. Y me equivoqué. Y me disculpo, pero esto nos pasa a todos", asegura.
Montero reconoce que "perdió los nervios" y que incluso "se le olvidó la letra de La playa", pero lo achaca a "un fallo técnico y nervios" y no a la toma de otras sustancias como se dijo: "No había tomado nada. Si no saben nada de mí, no sé cómo se atreven a decir lo que se ha dicho", dice con contundencia.
Tras aquella actuación, la artista atravesó el "peor" momento de su vida: "El peor sin duda. Ha sido horrible, brutal. Lo he pasado muy mal. No me lo esperaba, y mira que me han pasado muchas cosas en 22 años de carrera. Ha sido muy decepcionante porque yo lo he sacrificado todo por mi carrera y parece que mucha gente no lo entiende o no lo quiere entender. No pretendo gustar a todo el mundo, pero merezco que se me respete", cuenta.
Pese a todo, lo cierto es que se ha alzado con el número uno en ventas, algo que ni siquiera ha podido saborear: "A quién no le gusta ser número uno, claro, tampoco me voy a hacer la digna. Lo que pasa es que tenía tal shock con todo lo que había pasado que ni lo he disfrutado", declara.
Amaia, por último, asegura tener claro por qué le siguen llamando cantante en lugar de cantautora y por qué hay gente que no valora la gran carrera que atesora desde La oreja de Van Gogh: "No es por ser yo, es por ser mujer. Veían que era la chica del grupo y ya estaba el cliché: la cantante. A un hombre están deseando reconocerle que compone y a mí me ha costado años que la gente se entere. De hecho, aún no sé si ha quedado claro. No me lo valoran", sentencia.