Después de decirle a un hombre que acababa de conocer que don Juan Carlos quería casarse con ella, que le ofreció vivir en El Pardo, y que le dejó porque le ponía los cuernos con otra amante, una viuda valenciana, Corinna considera que se encuentra en medio de "una guerra entre Villarejo y el Estado español" pero reconoce que los audios publicados son verdaderos, aunque matiza que "no era consciente de que estaba siendo grabada por el comisario". Éste es el comunicado difundido por la revista Hola:
"Desde hace tiempo, ha habido una campaña de descrédito con motivación política contra mi persona. Siempre he actuado correctamente y pretendo continuar viviendo mi vida de forma tranquila, con independencia de los años de acoso constante y de los intentos de descrédito público que he padecido con un sinfín de información falsa. Tengo enorme respeto por las instituciones de España, pero no puedo permitir ser utilizada en un conflicto que no me atañe".
Corinna considera que se encuentra en medio de "una guerra entre Villarejo y el Estado español". Una portavoz de la empresaria ha confirmado al diario The Times, de Londres, que los audios son verdaderos, pero que su clienta "no era consciente de que estaba siendo grabada por el comisario durante un encuentro organizado por un amigo en común". La portavoz ha añadido al periódico británico que "Corinna no jugó ningún papel en este asunto".
Responsables de la Fiscalía Anticorrupción que investigan al excomisario Villarejo junto a la Unidad de Asuntos Internos de la Policía ven en la filtración de los audios un intento de Villarejo para presionar y amenazar con más material para ser puesto en libertad. Y se da por hecho que habrá más
Las grabaciones de Corinna Sayn-Wittgensteinlas las tenía guardadas Villarejo en su domicilio cuando el pasado 3 de noviembre agentes de Policía irrumpieron para registrarlo pero alguien de su entorno podría haber guardado las copias que ahora han salido a la luz.