Un juez ha ordenado un embargo cautelar sobre gran parte de los bienes de Vissi d'Arte Srl, la empresa que gestiona los activos de la millonaria. La actriz, harta de que sus capacidades sean cuestionadas por sus familiares, ha estallado: "No consiento a nadie que cuestione mis elecciones en la gestión de mis negocios. Mi vida es mía, trabajo desde que tengo 18 años y siempre he cuidado de mí misma", ha dicho
Nuevo frente abierto en la guerra familiar entre Gina Lollobrigida y su único hijo, Milko Skofic, y su nieto, Dimitri. Ambos solicitaron al juez el embargo preventivo de los bienes de la actriz, alegando que están gestionados por Andrea Piazzola, su asistente, a quien acusan de manipularla y aislarla de su familia con el fin de enriquecerse. "No es Andrea quien aleja a mi hijo, soy yo. Junto a mí está Andrea porque Milko no está. Mi hijo nunca aceptó trabajar conmigo. Siempre que he ido a América le he pedido que me acompañara y me ayudara porque habla idiomas y nunca ha venido, me ha dejado sola", ha dicho enfadada Lollobrigida en Corriere della Sera.
La diva italiana de 90 años está muy enfadada: "Estoy muy lúcida y hago con mi dinero lo que quiero. No consiento a nadie que cuestione mis elecciones en la gestión de mis negocios". Y ha añadido: "Mi vida es mía, trabajo desde que tengo 18 años y siempre he cuidado de mí misma".
Por su parte, el letrado de Milko y Dimitri ha querido puntualizar que no se trata de una "petición de inhabilitación" para la intérprete, sino que sólo es una manera de salvaguardar su patrimonio. Precisamente para ello los parientes han presentado en el Tribunal Civil de Roma una petición para que se apruebe un administrador provisional de los bienes de bienes Gina.
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