Después de dos años de relación, Elena Tablada y su novio Javier Ungría anunciaban boda a su regreso de Cuba hace unos días. La ex de Bisbal y el sobrino de Miriam Ungría pasaron las vacaciones de Semana Santa en la isla de donde procede la familia Tablada, que abandonó La Habana poco después de que Fidel Castro y sus barbudos tomaran el poder y expropiaran a todo el mundo sus bienes, fortuna y patrimonio.
En 2015, después de 41 años ausente de Cuba, Elena Tablada madre y sus dos hijas, Elena y Naelé, viajaron a la isla desde Miami, donde conservan la casa en la que se instalaron al dejar Cuba. Nada más pisar suelo cubano, madre e hijas vivieron grandes emociones al visitar la antigua casa familiar, alquilada por el gobierno cubano a una empresa extranjera. Se reencontraron con parte del servicio que trabajaba para el doctor Tablada y su esposa cuando vivían allí, abrazaron a viejos amigos y disfrutaron de un recorrido sentimental por los lugares en los que había vivido Elenita (a la madre la llaman así) y que sus hijas veían por primera vez.
La ex de David Bisbal se quedó enamorada del país de sus padres y se lo ha trasmitido a Javier Ungría. Y fue en La Habana donde el empresario le pidió matrimonio, y donde, según amigas de ambos, a Elena Tablada le gustaría casarse, si pudiera hacerlo: en la misma iglesia donde lo hicieron sus abuelos Elena y Jorge Tablada. El templo es el de San Juan de Letrán, un convento situado en la calle 19, en el barrio de El Vedado, la zona residencial de La Habana, una preciosa iglesia restaurada poco a poco en los últimos años. Si esta ilusión de la novia pudiera cumplirse, la boda tendría lugar a finales de este año, una estación en la que el sol y el buen tiempo están asegurados en las costas del Caribe.