La presentadora está viviendo entre hospitales. Después de pasar el domingo en la unidad de urgencias pediátricas con uno de sus mellizos, se ha convertido en la enfermera de su novio, Matías Dumont, al que acaban de operar de una lesión en la rodilla.
Con la cara pálida y visiblemente cansada, Raquel Sánchez Silva (44) llegó el pasado domingo día 1 a un centro hospitalario de Madrid con uno de sus mellizos, que abrazaba a su madre sin querer separarse de ella. Los gestos de los padres y los abuelos indicaban que el niño se encontraba con fiebre y dolor de garganta, algo muy habitual en esta época en la que Bruno y Mateo, que ya tienen dos años, han comenzado la guardería. Su padre, Matías Dumont (34) los acompañaba con rostro serio, tal y como se puede ver en las imágenes que ha publicado la revista Pronto.
El mismo día, Silva compartía una fotografía en las redes sociales en la que aparecía con rostro cansado y ojeroso: "Días raros. Los hay. Mejor contar con ello", decía junto al hastag "los estragos de la guardería en la salud del adulto".
Pero ahí no acabaron las labores de enfermería de Silva. Este domingo, una semana después de la visita a urgencias con el niño, Matías Dumont ha sido intervenido de una lesión en la rodilla en la clínica Ruber de Madrid. Él mismo lo ha anunciado en Instagram con una fotografía: "Todo salió perfecto. Tras un par de días, tengo el ligamento cruzado nuevo gracias al enorme Dr. Perez-Caballer y su equipo. Mil gracias Raquel Sánchez Silva y Elsa Silva, mis cuidadoras personales, y todo el equipo de la Ruber por un trato espectacular. En seis meses volveré a todos los deportes que tanto me gustan", ha dicho el productor argentino.
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