El hijo mayor de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin celebra este viernes su mayoría de edad. Permaneciendo siempre en un segundo plano, el sobrino del Rey Felipe VI estará rodeado de su familia y amigos en Ginebra en un día muy especial en el que recibirá la visita de su abuela, la reina Sofía.
La vida de Juan Valentín Urdangarin siempre ha ocupado un discreto lugar a pesar de un 'royal'. Si bien su primo mayor Froilán (20), con el que tiene un vínculo muy especial, logra acaparar toda la atención mediática, la discreción de Juan siempre le ha mantenido apartado de los medios.
Sin embargo, lo cierto es que el segundo nieto del rey Juan Carlos ha tenido una adolescencia muy 'movidita', que le ha llevado a tener que trasladarse de Washington a Barcelona y posteriormente a Ginebra, donde reside actualmente.
Juan nació en 1999 y desde el primer momento, cautivó a su abuela Sofía, que tiene predilección por él. Es el primer hijo de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin, quienes le hicieron convertirse en 'hermano mayor' justo un año después con la llegada de Pablo Nicolás.

Pese a que guarda una muy buena relación tanto con Pablo (16) como con Miguel (15), tiene adoración por Irene (12), a quien acompaña al cine cuando el resto de hermanos prefiere hacer otros planes.

Aunque viven en Suiza, tanto Juan como sus hermanos viajan en ocasiones a España sin sus padres para pasar unos días con sus primos. Juan y Froilán se llevan muy bien, aunque sus estilos de vida son totalmente diferentes. Respecto a los temas amorosos, y a diferencia de Froilán, al mayor de los Urdangarín-Borbón no se le ha conocido ni conoce ninguna novia.

Comparte con su padre su afición y gusto por el balonmano. Muy deportista, también le gusta el tenis y sobre todo la vela, uno de los hobbys favoritos de su madre y que práctica siempre que veranea en Palma de Mallorca.


Además, Juan está muy comprometido con la sociedad y colabora con varias ONGs. La pasada Navidad viajó a Vietnam con los compañeros del colegio suizo donde estudiaba para trabajar en la instalación de unos hornos de biogás en un poblado humilde del delta del Mekong. Además, este verano, coincidiendo con el Día Mundial del Refugiado, se hicieron diversos actos para concienciar y ayudar a este problema social, a los que acudió junto a su madre.
