La presentadora fue trasladada a una habitación de planta en la Fundación Jiménez Díaz tras permanecer dos días ingresada en una unidad especial este jueves por la tarde. Durante el cambio, que se llevó a cabo en plena calle, María Teresa Campos fue fotografiada a pesar de que su hija Terelu trató de evitarlo tapando a su madre con una sábana.

Según ha podido saber Informalia, la ex de Pipi Estrada sufrió un pequeño ataque de ansiedad al comprobar que no había conseguido su objetivo, a pesar de sus esfuerzos y los de el equipo de seguridad de la Fundación. Poco después, el entorno de María Teresa Campos se puso en contacto con todas las publicaciones para pedirles que no compraran las imágenes de la comunicadora en silla de ruedas, despeinada y con un parche en el ojo. Dicho y hecho: todas ellas han rechazado las fotografías, que finalmente, no saldrán a la luz.

Las alarmas saltaron unas horas antes, cuando el equipo de seguridad de la Fundación Jiménez Díaz alertó a la familia de María Teresa de que habían localizado a un fotógrafo tratando de colarse en la unidad especial de ictus, donde se encontraba aún la presentadora. A pesar de sus intentos por mantener la privacidad de la paciente, no consiguieron que estos no captaran las imágenes del traslado, que se llevó a cabo por la tarde y en plena calle, ya que no hay conexión interna entre la UVI y la zona de habitaciones privadas del centro.

Aún así, tanto Terelu como Carmen Borrego pueden respirar tranquilas ya que las fotografías de su madre, a pesar de haberse realizado, no verán la luz. Tanto la familia de María Teresa como el equipo médico que la trata intentan que se mantenga relajada y tranquila, por lo que se han restringido las visitas a la habitación de planta.

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María Teresa Campos

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