A punto de regresar a Madrid para preparar el desfile del viernes en la Madrid Fashion Week, Ágatha Ruiz de la Prada fue sorprendida en Nueva York con la noticia de que estaba viviendo un amor con un joven político español.
"Ojalá fuera verdad", dice una de sus mejores amigas, que está deseando que se le pase a la diseñadora el disgusto por su ruptura con Pedro J. Ramírez, que ahora mantiene una relación sentimental con la abogada Cruz Sánchez de Lara.
"Cuando se lo dijimos, se partía de risa, aunque por otra parte está muy enfadada por el tema de esos encapuchados que asaltaron el despacho de la novia de Pedro J. y se llevaron papeles relacionados con el periodista", añade la amiga de Ágatha, "ya está un poco harta de esta historia".
Todo el entorno de la diseñadora desmiente la noticia publicada por Pilar Eyre en Lecturas sobre ese inicio de romance entre Ágatha y alguien de la clase política.
El caso es que sí hubo una cena la pasada semana de la modista y un conocido político español en el restaurante 'El Qüenco de Pepa', uno de los locales de moda en Madrid. El político o ex político es nada menos que Alberto Ruiz Gallardón. Con un pequeño detalle: en la mesa se sentaba también su esposa, Mar Utrera. Pero el ex alcalde de Madrid ni es joven, ni está en activo en la política ni tiene un romance con Ágatha, que de momento no tiene ni tiempo para volver a enamorarse.
¿Será un rumor interesado para calentar el ambiente del desfile del viernes, en el que por primera vez en muchos años no estará Pero J. en primera fila para animar a su mujer?
Quien se sentará en el front-row de la pasarela es Mar Utrera, señora de Ruiz Gallardón. Ágatha está recuperando en solitario los amigos de siempre que le corresponden por derecho propio. No en vano desciende de aristócratas por parte de padre y de madre, es baronesa y condesa con Grandeza de España y en su familia también hay pintores y arquitectos de renombre.
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