Ni lujosos perfumes, ni caros zapatos, la supermodelo quería un culo nuevo. Y dicho y hecho, la top parece haber pasado por quirófano para aumentar y tersar sus glúteos. Así lo confirman los tabloides estadounidenses y las fotografías de su última sesión de fotos. No es la primera vez que pasa por el bisturí: ya se aumentó los pechos y redujo el tamaño de su nariz.

Gisele Bundchen gets her ass back to work for a shoot in Rio https://t.co/6cY4VMfhOu pic.twitter.com/HLiKxqQ8C9

? MovieHotties (@MovieHotties) 19 de diciembre de 2016

A sus 36 años, es la modelo que se ha retirado más pronto de las pasarelas pero la que más sigue ganando con sus ingresos en publicidad: en 2015 era considerada una de las modelos más ricas del planeta. Su familia se ha convertido en la envidia de muchos y su cuerpo sigue siendo una leyenda. Pero a pesar de que ella ha criticado siempre el paso de las modelos por el quirófano, Gisele ha pecado. Y no sólo una vez.

Unas instantáneas en las que posa para el fotógrafo Mario Testino no deja lugar a dudas. En ella luce los glúteos más tersos y con más volumen que hace unos meses, donde se le podía ver incluso algo de celulitis. La modelo ya sabía lo que era pasar por el bisturí, pues en 2015 se aumentó los pechos, a pesar de declarar su negativa a someterse a este tipo de operaciones.

El retoque de su nariz también ha sido siempre el blanco de los tabloides. La germana siempre ha hablado en las entrevistas de que su perfil le trajo problemas en sus inicios, cuando muchos le decían que no trabajaría nunca porque su nariz era "demasiado grande". Desde hace años, luce un miembro mucho menos abultado y desapercibido.