La modelo da la cara en España tras haber pasado unos días en las islas Azores llorando y desconectada en compañía de una amiga. Más tranquila, ha desvelado cómo se encuentra después de anunciar su divorcio de Feliciano López: "Estoy muy triste". Desde que apareció en la portada de Hola para contar lo 'frío y distante' que fue todo, 'rompe su silencio' continuamente...
Con semblante cabizbajo aunque muy guapa, vestida con un modelo floreado, Alba Carrillo visitó la sede madrileña de Mediaset, donde negocia un jugoso contrato televisivo. Reconoce que atraviesa momentos muy complicados: "Voy poquito a poco". Pero ocultó los problemas con la familia de Feliciano y aseguró que sigue enamorada de su marido, aunque ya no hay vuelta atrás: "No creo que sea posible una reconciliación".
Alba afirmó que está volcada en su hijo: "Como siempre, hace cuatro años y medio que me di cuenta de que Lucas es el hombre más importante de mi vida". Eso sí, la maniquí decidió guardar silencio a las preguntas sobre la familia de Feliciano y no pudo evitar una risa, tal vez nerviosa, cuando un periodista le planteó si el tenista había sido un buen marido.
Mientras, el toledano mantiene un frío pero discreto silencio. Tras ser tras ser eliminado del torneo de Queens, en Londres, donde ha estado de marcha nocturca con Nieves Álvarez y otros amigos, el tenista aterrizó en Mallorca donde ha participado en un trofeo de exhibición, el Trofeo Toni Nadal. Allí, ajeno a todo el revuelo que ha provocado su divorcio y la exclusiva de su ex, Alba Carrillo, ha lucido su mejor sonrisa y junto a sus amigos, Carlos Moyá y Rafa Nadal, con los que ha compartido fotografías a través de las redes sociales. Este miércoles aterrizaba en Londres de nuevo, donde luchará en la hierba de Wimbledon.
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