La actriz se ha trasladado a la isla pitiusa para disfrutar de las vacaciones de verano. Allí, acompañada de su marido y su hija pequeña, ha tratado de olvidar por unos días sus problemas fiscales: está acusada de defraudar casi 800.000 euros a la Hacienda Pública.
Apenas dos días después de declarar ante la Audiencia Nacional en Madrid, Ana Duato decidió hacer las maletas y viajar a Ibiza, la isla favorita de los famosos. Allí ha sido fotografiada disfrutando de una jornada playera acompañada por su marido, Miguel Ángel Bernardeau, y su hija María, de 11 años. En las imágenes, que recoge la revista Diez Minutos, la actriz se deja ver bastante cabizbaja y seria, algo poco habitual en ella. Descansó sentada en la arena y también aprovechó las buenas temperaturas para darse un chapuzón en solitario. Eso sí, siempre bajo la atenta mirada de su marido, que se ha convertido en su mayor apoyo a pesar de que él también está imputado.
Su hija María fue la única que consiguió arrancarle una sonrisa a la actriz, que lució una silueta algo más delgada de la que mostró el año pasado (en las imágenes siguientes), signo de que la preocupación ha hecho mella en ella. Ya por la tarde, Ana decidió cubrirse con un vestido y un sombrero antes de regresar a su casa.


La actriz, que acaba de cumplir los 48 años, atraviesa un momento muy duro. El pasado mes de mayo, Ana Duato y su marido fueron imputados por fraude fiscal, acusados de defraudar 794.388 euros con la ayuda del despacho de abogados Numancia, una acusación que también ha alcanzado a su compañero en la serie Cuéntame, Imanol Arias. El pasado día 15, Ana Duato declaró en la Audiencia Nacional, defendiendo su inocencia y culpando a su asesor, Fernando Peña: "Hoy me siento tranquila porque he podido aclarar muchas cosas. Quería agradecer a todos los que habéis creído en mi inocencia", decía, aliviada.