Álvaro Muñoz Escassi tiene a sus 41 años fama de playboy después de haber robado el corazón a varias mujeres que se entregaron al jinete. Pero parece que después del escándalo de su hija secreta el próximo paso del sevillano va a ser sentar la cabeza, es decir, casarse. Y no lo hará precisamente con una muerta de hambre.
Esta semana ha habido importante presencia española en Miami. La nueva edición de la Fashion Week, una pasarela de moda que crece cada año en importancia por su posición como puerta para el mercado latino, y que ha reunido a conocidos diseñadores españoles como Custo Barcelona, Ágatha Ruiz de la Prada, la lencería de Andrés Sardá o Antonio Banderas, que dio a conocer su primera colección masculina.
Fue menos visible estos días otro famoso español ahora residente en la ciudad más latina de Estados Unidos: Álvaro Muñóz Escassi, contratado en Florida por un magnate venezolano para cuidar sus caballos. Pero por poco tiempo: el jinete español tendrá dentro de pocas semanas una ocupación mucho más placentera y productiva.
Al parecer, su boda con la millonaria venezolana Raquel Bernal podrá celebrarse en menos de un mes. Una relación que adelantó en exclusiva Informalia. Raquel está divorciada de un potentado venezolano y es madre de una hija de 15 años. Puso en marcha negocios muy rentables gracias a las relaciones que estableció durante su matrimonio y también a los amores que vivió después con importantes personajes del gobierno chavista de Nicolás Maduro.
Raquel ha invertido en República Dominicana en hoteles de lujo, tiene mansión en La Moraleja, en Madrid, además de otras empresas, y es una financiera con olfato para los negocios. Muñóz Escassi ha tardado en decidirse a contraer matrimonio a pesar de sus sonados romances con Lara Dibildos y la presentadora Sonia Ferrer. Pero esta vez ha dado en la diana.



