Y no es que la bonita pareja formada por la cantante y el cancerbero del Manchester hayan roto, pero la extriunfita ya se ha aplicado el cuento de "mi vida privada es mía" y no parece querer compartir con nadie los días de incertidumbre profesional que vive su chico y las consecuencias que ello implica para ambos. No ha sido la primera vez que Edurne hace mutis por el foro para no contestar a preguntas con tintes más personales, pero la última 'espantá' sorprendió por el poco disimulo. ¿El lugar? Hotel Miguel Ángel. ¿El motivo? Televisión Española celebraba los 18 años de su programa insignia, Corazón. Los personajes más pintones del papel cuché empezaron a desfilar por la alfombra (Ana Obregón, Gloria Camila o Concha Velasco), pero todas ellas se vieron irremediablemente eclipsadas por la presencia de Edurne. El limbo profesional en el que se encuentra su novio, David De Gea, la ha puesto en el ojo del huracán mediático y sus declaraciones sobre el presunto fichaje de su chico por el Real Madrid y la posibilidad de que ella destrone a Sara Carbonero como principal WAG's del banquillo merengue ahora que la marcha de Iker Casillas es un hecho eran lo que todo periodista allí presente esperaba.

A pesar de que fue de las últimas en llegar, la representante de España en Eurovisión hizo su entrada en el photocall, luciendo un impresionante vestido de paillettes firmado por José Fuentes Barcelona con el que dejó atónitos a todos los fotógrafos, para los que posó con una enorme sonrisa durante varios minutos. Tiempo que a su representante le resultó suficiente para aclarar a los redactores allí presentes que la joven no estaba dispuesta a hablar sobre su pareja. Sin embargo, de poco sirvió la advertencia, ya que Edurne ni siquiera dio la oportunidad a los reporteros de preguntarle por su próxima gira o por sus proyectos profesionales más inminentes. Alegando que "tenían mucha prisa" porque la estaba "esperando Anne Igartiburu para hacer un directo", una trabajadora de la cadena pública se la llevó, no sin antes prometer que la extriunfita volvería a la alfombra roja en cuanto terminara su aparición en el programa. Pero ese regreso no se produjo.

Esta nueva y sorprendente actitud ha hecho que esa imagen cercana, sincera y humilde que siempre ha reflejado la de Torrelodones se desvanezca, especialmente cuando, ante la atónita mirada de todos y tras recorrer una improvisada pasarela mientras cantaba, avisó a la propia Anne de que abandonaría el programa si era preguntada por su novio. "No me digas eso que me tengo que ir otra vez", aseguró.

Tanto la presentadora como el resto de medios allí agolpados nos quedamos con las ganas de saber si Edurne y De Gea iniciarán juntos una convivencia tras casi cinco años de noviazgo a prueba de kilómetros, ya que solo doce meses después de empezar a salir, él se trasladó a Manchester. Un destino que parece que De Gea quiere abandonar sea como sea ahora que se ha convertido en el cancerbero suplente de la Selección Española y su nombre en España empieza a sonar con fuerza.

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