La presentadora se ha desplazado este martes a Barcelona con su hija Laura para acudir a la primera prueba del vestido que lucirá en su boda con Sergio Fontecha, el próximo 30 de julio. Se trata de un diseño de Aire Barcelona cuyos detalles, como manda la tradición, quiere mantener en secreto: "Es elegante, lo que yo buscaba, precioso".
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Tras pasar varias horas en el interior del atelier, madre e hija salieron muy sonrientes. Sonia Ferrer, que se casa por segunda vez tras su primer matrimonio con Marco Vricella, padre de Laura, está muy ilusionada por su boda con Sergio Fontecha, el policía que ocupa su corazón desde hace dos años. "Tengo ganas de que llegue el día ya. No estoy nerviosa. Lo que estoy es muy ilusionada y con mucha impaciencia, tengo muchas ganas de que llegue el día y los nervios imagino que llegarán cuando ya tenga el día cerca, pero por ahora es impaciencia y ganas".
La presentadora ha desvelado algunos detalles del gran día, como que será una ceremonia civil que celebrará en una finca a las afueras de la capital, entre Valdemorillo y El Escorial, y en la que Laura tendrá un papel muy importante.

Sonia se divorció del cirujano Marco Vricella en 2013, después de seis años de matrimonio. Rehízo su vida con Álvaro Muñoz Escassi pero, después de tres años de noviazgo, decidieron continuar por caminos separados. En 2019 conoció a Sergio, licenciado en Derecho y Ciencias Policiales e inspector de Policía Nacional. Está divorciado y, además, es muy deportista y amante del surf. Ambos comparten el amor por el mar, la playa y los deportes de agua.