El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, se casará dentro de la cárcel de Belmarsh, sur de Londres, el próximo 23 de este mes, según dio a conocer este domingo su prometida Stella Moris, a través de Twitter.
Julian Assange allowed to get married in prison https://t.co/CBBt6Z6AyN
— The Independent (@Independent) March 13, 2022
"Actualización de la boda: !Belmarsh ha programado nuestra boda! Miércoles 23 de marzo a las 13 h.", afirma Moris en un tuit de su cuenta.
Además y según cuenta el Daily Mail, Assange, de 50 años, irá vestido con una falda escocesa especialmente confeccionada para la ocasión por Vivienne Westwood, "en honor a sus raíces escocesas".
El diario añade que una cuarta parte de los invitados a la fiesta serán guardias del penal de máxima seguridad de Belmarsh, situado al sur de Londres y en el que se encuentra Assange desde hace casi tres años.
La activista y su prometida se comprometieron durante el exilio de siete años de Assange en la Embajada de Ecuador en Londres mientras evitaba la extradición a Estados Unidos.
Este país solicitó al Reino Unido la extradición de Julian Assange por 18 delitos de espionaje e intrusión informática que, según la defensa, acarrean 175 años de cárcel en ese país.
Estados Unidos persigue a Assange, que lleva más de una década confinado en Inglaterra pese a no haber sido condenado por ningún delito, por las publicaciones de su portal WikiLeaks, que en 2010 y 2011 expuso abusos de ese país en su centro de detención de Guantánamo (Cuba), así como presuntos crímenes de guerra en Irak y Afganistán.
Derrame cerebral
Julian Assange sufrió en octubre un derrame cerebral en la cárcel de Belmarsh en la que ahora se casará. Se dijo que fue debido al "estrés extremo" causado tras comparecer telemáticamente ante los Tribunal. La noticia se dio a conocer después de que la justicia británica aceptara la extradición de EE.UU. El activista, de 50 años, se quedó con el párpado derecho caído, problemas de memoria y signos de daño neurológico pero su situación no parece que vaya a librarle de pasar su tercera Navidad tras las rejas, a la espera de que se conceda definitivamente su extradición a Estados Unidos, país que se ha comprometido a tratarle bien y a proporcionar al activista un juicio justo.
Un 'ataque isquémico transitorio', la interrupción del suministro de sangre al cerebro, puede ser una señal de advertencia de un derrame cerebral completo. Desde entonces, Assange se ha sometido resonancias magnéticas y sigue tomando medicamentos.
Moris, de 38 años, prometida del editor de WikiLeaks y abogada, asegura que "Julian está luchando", pero teme "que este mini accidente cerebrovascular pueda ser el precursor de un ataque más importante". La futura esposa de Assange dijio que lo sucedido en octubre aumenta sus "temores sobre su capacidad para sobrevivir cuanto más se prolongue esta larga batalla legal".
Pidió que el asunto fuera "resuelto con urgencia". La letrada comparó la situación de su prometido con la de los animales atrapados en jaulas en un zoológico. "Les acorta la vida. Eso es lo que le está pasando a Julian. Los interminables casos judiciales son extremadamente estresantes mentalmente". Se quejaba de que a Julian le mantengan en su celda "durante largos períodos" y de que "le faltan aire fresco y luz solar, una dieta adecuada y los estímulos que necesita".
Assange recibió en diciembre la peor de las noticias al conocer el revés legal del Tribunal Superior de Justicia británico que anuló una sentencia emitida este año que impedía la extradición a los EE.UU para enfrentarse allí a cargos de espionaje y que pueden suponer cadena perpetua de facto si las condenas que se solicitan salen adelante. El Tribunal revocó el fallo anterior después de que el gobierno de Estados Unidos ofreciera garantías sobre su posible encarcelamiento, cosa que la novia de Assange no acepta: "Creo que este juego de ajedrez constante, batalla tras batalla, el estrés extremo, es lo que causó el derrame cerebral de Julian el 27 de octubre", dijo. Moris describía así la situación de su prometido: "Se siente realmente mal, demasiado enfermo para seguir la audiencia". "Debe haber sido horrible escuchar una apelación ante el Tribunal Superior en la que no puedes participar, que trata sobre tu salud mental y tu riesgo de suicidio y en la que Estados Unidos argumenta que te lo estás inventando todo". "Estaba en un estado verdaderamente terrible. Sus ojos estaban desincronizados, su párpado derecho no se cerraba, su memoria estaba borrosa".
Assange fue examinado por un médico, que encontró una respuesta tardía de la pupila cuando se le iluminó un ojo con una luz, un signo de posible daño nervioso. Moris y Assange tienen dos hijos, Gabriel, cuatro, y Max, dos, y llevan comprometidos cinco años.
Estados Unidos quiere juzgar a Assange por conspiración para obtener y divulgar información que afecta a la seguridad nacional después de que Wikileaks publicara cientos de miles de documentos filtrados relacionados con las guerras de Afganistán e Irak. Se refugió en la Embajada de Ecuador en Londres en 2012 porque temía la extradición, y permaneció siete años hasta que lo sacaron por la fuerza y lo enviaron a Belmarsh en 2019.
Apeló contra la sentencia pero la resolución de su recurso podría tardar meses o incluso años, por lo que potencialmente años podría seguir en prisión preventiva en el Reino Unido mucho tiempo sin ser juzgado. Para su novia ,futura esposa y madre de sus hijos "es un ultraje que alguien que no está condenado por ninguna sentencia deba estar en prisión durante años y años" "Julian no es una amenaza para nadie y representa un total desprecio de su libertad individual y nuestro derecho a una vida familiar", añade. "Estados Unidos juega sucio en cada paso que da, es una guerra de desgaste", dijo.
