Tina Tuner, a sus 82 años, vive una vejez dorada al lado de su marido, Erwin Bach (65). La leyenda viva de la música ha comprado recientemente un complejo de diez edificios en Suiza, donde el matrimonio reside desde 2013. Por su nuevo 'capricho', la cantante ha desembolsado 76 millones de dólares.
El complejo está en un enclave excepcional con vistas al lago Zürich y tiene una superficie de 240.000 pies cuadrados, lo que equivale a 22.296 metros cuadrados. Cuenta, además, con una piscina, un estanque privado, un arroyo e incluso con una cubierta para botes.
La cantante se hizo con esta propiedad, por la que también se interesó el tenista Roger Federer, en septiembre del año pasado, un mes antes de vender, por 50 millones de dólares, su catálogo musical a la compañía alemana BMG.
Su marido, de hecho, habló de la nueva adquisición inmobiliaria en la prensa alemana, tal y como recoge The New York Post. Aseguró que tienen intenciones de convertirlo en un "nuevo retiro de fin de semana en las inmediaciones".
Al mismo tiempo, el alemán hizo balance de la plácida vida de los dos en Suiza. Hay que recordar que obtuvieron la nacionalidad en 2013, el mismo año en el que se casaron después de casi tres décadas de relación: "Nos sentimos muy cómodos. Debido a la pandemia y sus consecuencias, lamentablemente, como muchos otros suizos, nos abstenemos de viajar".
Retirada de la música desde hace más de trece años, en 2018 sufrió el mayor golpe de su vida: el suicidio a los 59 años de su hijo mayor, Craig Turner, fruto de su relación con Raymond Hill. La artista estadounidense tiene otros tres: Ike (64), Michael (63) y Ronnie (61), de su primer matrimonio con el músico de rock y blues Ike Turner.
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