Tamara Falcó está tan enamorada de Íñigo Onieva que parece que le dan igual las polémicas informaciones que, una vez y otra, salen sobre él. Tanto es así que la marquesa de Griñón ha hablado de cómo le gustaría que fuese su "gran boda" con el diseñador de coches.

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Aunque todavía no tienen planes formales de pasar por el altar, la hija de Isabel Preysler le confesó este jueves a Pablo Motos cómo sería su enlace ideal: "No creo que la hiciese gigantesca. Mi padre me dijo que en su primera boda al final de la noche seguía saludando a gente porque fueron 1.000 personas, ¡eso es una pesadilla!", aseguró.

No obstante, eso no quita para que su boda se celebre por todo lo alto: "La verdad es que no lo sé... A una boda va la gente que más quieres y con los que te lo pasas fenomenal. Será una gran boda".

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No es la primera vez que Tamara habla de una posible boda con el madrileño, con el que lleva saliendo desde hace más de un año. Hace unas semanas ya confesó incluso donde le gustaría celebrarla: "Yo creo que en casa de mi padre, en Casa de Vacas, donde se hace el vino... O en El Rincón, donde vivía él. También en Plasencia, donde se casó mi hermana… Yo creo que en casa de mi padre", desveló en Lecturas, recordando a su desaparecido padre, como no podía ser de otro modo.

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