Ya es mediodía ha puesto el foco este jueves a una ferretería de Madrid que está teniendo ya problemas de abastecimientos por la psicosis colectiva generada ante el aviso de un posible apagón en toda Europa. El dueño de un establecimiento ha asegurado que se ha disparado las ventas de infiernillos portátiles y camping gas.
Sonsoles Ónega despidió la conexión con su reportera Inma Rivas desde el local soltando una frase que pilló por sorpresa a todos los presentes. "¡Larga vida a las ferreterías!", exclamó la presentadora antes de hacer una confesión que nadie esperaba. En especial, Cristina Cifuentes, que le hizo saber enseguida que no salía de su asombro.
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Sonsoles Ónega confiesa su inesperada afición
"Yo es que me pierdo en las ferreterías, me gustan más que ir a comprar ropa", aseguró la periodista, que provocó que la expredidenta de la Comunidad de Madrid saltase. "¿En serio? ¡A mí me fascinan!", dijo la expolítica, haciéndole ver que compartían hobby. No obstante, Cifuentes se sorprendió, ya que consideraba que a su compañera no le pegaba este tipo de afición.
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"Lo último que me podría imaginar de ti", insistió Cifuentes mientras Ónega se reafirmaba. "Me encanta, un tornillo, un alicate, un hornillo, la llave allen y todos esos productos", aseguró la presentadora antes de que la tertuliana le hiciera una propuesta. "Te voy a regalar un cinturón de herramientas que tengo dos", comentó entre risas.