Joaquín Prat atraviesa una nueva etapa en su vida tras divorciarse de Yolanda Bravo, madre de su único hijo de seis años. A sus 46 años, el presentador de Mediaset vuelve a estar soltero y parece que vive una "buena racha", según ha confesado su hermana, Alejandra Prat.

Preguntada por los reporteros de Europa Press, la periodista ha dejado claro que su hermano está atravesando un muy buen momento: "Todos bien, todos felices y nada. Todo muy bien y todo fácil", ha respondido. "Está fenomenal, le va súper bien en el programa, es una pasada. Es el programa favorito de las tardes y ahí estamos todos viéndole cada tarde", ha alegado la hermana del mayor de los Prat.

Alejandra, eso sí, ha preferido no entrar en más detalles sobre la separación, pero sí ha dejado entrever que ha sido de mutuo acuerdo y por el bien común de ellos y de su hijo: "Hay una buena racha en los Prats", ha señalado, asegurando que su hermano está encantado con su nueva vida como padre divorciado.

Lo cierto es que en lo laboral la situación de Joaquín es idílica. Tras más de 13 años en el mundo de la televisión, es uno de los rostros más importantes de la cadena. Durante varios veranos, ha sido el encargado de sustituir a su amiga, Ana Rosa Quintana, en sus periodos de vacaciones.

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Desde 2019, además, presenta por las tardes Cuatro al día. Compagina esta labor con la sección que conduce de crónica social de El Programa de Ana Rosa. Según cuenta Blau, Prat recibe 1.500 euros diarios por acompañar a la veterana presentadora. Estas altas cantidades le supondrían a Joaquín nada más y nada menos que medio millón de euros anuales, una cifra que le haría ser uno de los presentadores mejor pagados de Mediaset.

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