Día histórico para Britney Spears. Su padre, Jamie Spears, ha sido suspendido como tutor de los bienes de la cantante, posición que llevaba ejerciendo desde hace 13 años. John Zabel, un contador público certificado, ha sido elegido por el equipo de Britney para sucederle temporalmente como fiduciario interino.

"Creo que la suspensión de James Spears como tutor es lo mejor para su pupila. Esta orden se hará efectiva de forma inmediata", decretó la jueza Brenda J. Penny este miércoles por la tarde en el Palacio de Justicia Stanley Mosk en el centro de Los Ángeles, donde se reunieron cientos de seguidores de la cantante para celebrar su libertad bajo el lema viral #FreeBritney.

Durante la vista, el abogado de la artista, Mathew Rosengart, exigió la suspensión inmediata de la tutela y acusó a Jamie de abusar de la cantante no solo durante la duración de la tutela, sino desde la infancia. Lo hizo apoyado en la investigación de The New York Times, que descubrió que el padre de Britney colocó en secreto un dispositivo de grabación de audio en el dormitorio de su hija y capturó cientos de horas de interacciones privadas.

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La Corte Superior de Los Ángeles ha programado una vista el 12 de noviembre en la que se pondrá el punto final a la custodia. Este último movimiento llega después de que el propio padre de la artista renunciara a la tutela judicial de su hija por la que ha controlado su vida y su dinero durante los últimos 13 años.

La Justicia da así la razón a Britney, que hizo una "súplica apasionada" el 23 de junio en un discurso pronunciado en el juzgado: "Solo quiero recuperar mi vida", dijo. "Y han pasado 13 años y es suficiente. Ha pasado mucho tiempo desde que soy dueño de mi dinero. Y es mi deseo y mi sueño que todo esto termine sin ser probado", alegó la cantante, que ya es libre.

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