Nuevo disgusto para Tom Cruise durante el rodaje 'gafado' de Misión Imposible 7. A todos los contratiempos que llevan desde 2020 se suma ahora el robo del vehículo del actor. Aunque el coche ha aparecido, de todo lo que llevaba en el interior, ni rastro.
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The Sun cuenta que el pasado miércoles denunció el robo de su flamante BMW X7, valorado en 100.000 libras (116.000 euros). Lo tenía aparcado en las inmediaciones del hotel de Birmingham, donde se alojaba mientras rodaba unas escenas en un centro comercial con Hayley Atwell, con quien además se rumorea que podría mantener un noviazgo.
Pese a toda la seguridad que había alrededor, los ladrones se las ingeniaron para escanear la cerradura del auto y clonar la llave. Los delincuentes se llevaron el coche, que finalmente apareció gracias al rastreo electrónico de la Policía. Sin embargo, sí se llevaron lo de su interior: miles de libras en objetos personales del oscarizado intérprete. Dicen que cuando se percató del robo, se volvió "loco".
"Tom había usado el automóvil para desplazarse por Birmingham y parte de su equipaje y pertenencias estaban dentro cuando se lo llevaron", han señalado las fuentes a este tabloide.
El rodaje de la película está siendo una auténtica hecatombe. Lo han tenido que paralizar varias ocasiones por la pandemia y sus numerosas localizaciones (en Noruega, Estados Unidos, Inglaterra...) no hacen más que complicar las cosas. Hace unos días, el ex de Nicole Kidman aterrizó con el helicóptero en el jardín de una familia porque el aeródromo de Conventry estaba cerrado: "Resultó ser un día increíble. Fue surrealista, todavía no puedo creer que haya sucedido", contó la dueña de la propiedad a la BBC.
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