Si te apellidas Pantoja y no te hablas con Isabel está claro que tienes el futuro asegurado. Y sino que se lo digan a Paquirrín, que fue el primero en empezar una rentabilísima guerra sin cuartel contra su madre que le ha reportado en su cuenta corriente un pastizal suficiente, entre programas y entrevistas, según contó él mismo, como para que vivan sus hijos y sus nietos. Un millón y medio de euros, dijo hace apenas unas semanas que tenía. Así se puede comprar coches caros.

Le siguió los pasos su mujer, Irene Rosales, que la semana pasada, después de dejar su trabajo en Viva la vida se ganó unos eurillos con un posado exclusivo que, según sus compañeros, no será el último, porque así gana más que yendo todos los fines de semana al programa.

Y como les ha ido tan bien y es un terreno que conoce de sobra, Isa Pi ha decidido seguir su ejemplo. Tanto es así que, según ha podido saber Informalia, es la próxima en marcarse un posadito en su revista de cabecera largando sobre su mamá, aprovechando que la tonadillera ha cumplido los 65 años en el peor momento de su vida. Triste, arruinada y sola. La lágrima vende, aunque sea de cocodrila.

La relación entre madre e hija nunca ha sido muy fluida. Muchos dicen que por el carácter rebelde de Chabelita y otros que por la opresión y control que sentía por parte de su madre. Pero lo cierto, es que, desde que la niña cumplió los 18 y, se marchó de casa, han hablado muchas más veces mal públicamente la una de la otra que al revés. Y esto es lo que presumiblemente va a pasar ahora.

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Isa, al parecer, está triste porque mamá Isabel no le habla desde que su hermano la puso a parir en la tele. No le coge el teléfono, no le deja ir a Cantora y su último encuentro, en la finca, cuando Isa Pi tuvo que saltar la valla, no acabó nada bien. Tanto es así que el día 2 de agosto, día del 65 cumpleaños de la tonadillera, fue sin fiesta, sin familia y, cada uno por su lado, Isa se puso nostálgica porque la echa de menos… ¿Será esa ahora su táctica?

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Su intención era llamar a mamá para, al menos, felicitarla. Desconocemos si lo consiguió, aunque seguro que lo sabremos. Lo que sí hizo fue contar en sus redes sociales como solía pasar esos días cuando aún no se había marchado de Cantora: "Felicidades en este día que tantos momentos buenos nos ha dado. Para mí, desde pequeña, era una fecha súper importante. Seguramente hayáis escuchado que el día 2 de agosto, Cantora se llenaba de amigos, de comida, de risas, de música, de chistes, de cantes, de bailes… Para mí era lo más. Terminaba mi cole en junio y hacíamos el viaje al campo donde yo pasaba los tres meses enteros. Mi entrenamiento estaba aquí, así que, como os imaginaréis, estaba deseando que llegase el cumple de mamá. Me encargaba de organizarle una actuación con mi prima Alma y mi amiga Myriam. Para ello nos hacíamos nuestro propio vestuario, ensayábamos durante todo el mes de julio hasta que estuviera absolutamente todo perfecto. ¡Y a ella le encantaba! También lo solía hacer con Anabel y con Kiko cuando venía de América de trabajar".

Y continúa: "Ahora de mayor, echo de menos esas cosas. Y aunque el tiempo no lo puedo regresar -probablemente mi madre lo querría más que yo- ella sigue estando en mi vida y yo en la suya. Algún día estaremos como aquí, poniéndonos al día mientras yo como las papas con carne. Yo lo sé. No hablar de muchas cosas, que las dos somos muy contundentes, pero sí charlar de mis estudios, de Alberto, de mi sofá nuevo, de que me tienes que enseñar a cocinar, de que coma que estoy muy delgada, de que tenga cuidado en la carretera...".

Toda una declaración de intenciones por parte de Chabelita, con ganas de reconciliación, que quizás vuelvan a verse frustradas por su próxima exclusiva.

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