Paloma Cuevas es una mujer nueva tras firmar hace unas semanas su divorcio de Enrique Ponce. La cordobesa se ha escapado a París con sus hijas, Palomita y Bianca, para disfrutar de unos días inolvidables con ellas. Mientras tanto, el torero exprime su amor con Ana Soria en el nuevo piso de Almería al que se han mudado por 1.500 euros al mes, entre rumores de boda.

La propia Paloma ha dado fe de este viaje a través de sus stories de Instagram. Este martes compartió un vídeo desde las alturas en el que se aprecian los lugares más emblemáticos de la capital francesa: la Torre Eiffel, Los Campos Elíseos...

Después también publicó una imagen suya desde el teleférico. En ella posa muy relajada y feliz, ya que con la compañía de sus dos hijas se siente plena. Paloma también ha visitado otros puntos emblemáticos de la ciudad como los jardines de la Ciudad de La Luz o los principales museos. En redes no ha mostrado a sus hijas, aunque Hola asegura que ha viajado con ellas. 

Hace un par de fines de semana Paloma también se lo pasó en grande al acudir a la boda entre el hijo de la diseñadora de joyas Cristina Yanes, José Luis Santos, con Fátima Úrculo, que se celebró en el palacio de Elsedo en Pámanes, en Cantabria. De ambos planes ha disfrutado con una complicación menos, pues está tranquila tras firmar a mediados de julio el acuerdo de divorcio de Enrique tras un año de la separación. Concretamente lo hicieron por medio de sus representantes legales en el despacho de abogados Senn Ferrero de Madrid, tal y como contamos en Informalia.

Se hizo "con absoluta cordialidad, de mutuo acuerdo y sin ninguna discrepancia económica", según nos aseguró una fuente familiar. Ella se queda con la custodia de las niñas, aunque él podrá visitarlas siempre que quiera. En lo profesional, está plenamente volcada en "proyectos que ilusionan" con su gran amiga Rosa Clará. También cuenta los días para recibir el próximo 8 de agosto un premio en el Festival Starlite de Marbella.

comentarios0WhatsAppFacebookTwitterLinkedin