Jon Rahm hizo historia hace unas semanas al convertirse en el primer español en ganar el Open USA, pero el golfista vasco quiere más. Este jueves comienza el Open Británico y el deportista tratará de conseguir otro gran éxito, emulando así a su ídolo, Severiano Ballesteros, quien lo ganó en 1984 y 1988.
Con motivo de este nuevo reto profesional, Jon ha concedido una entrevista en la que vuelve a mostrar su admiración por Seve y cuenta algunos detalles íntimos de su vida personal junto a su mujer, Kelley Cahill, y su hijo, Kepa, que nació en el pasado mes de abril. Él le ha cambiado su forma de ver la vida, tal y como reconoce a ABC: "Mi primer hijo me ha traído más calma. No sé cómo explicarlo, es un pequeño salto de madurez que me está ayudando mucho en las propias vueltas de golf. En otros años, cuando me venían momentos complicados, quizá hubiera perdido los papeles, pero este año lo estoy viviendo de una manera diferente. No sé, es como si supiera que Kepa está ahí mirando y quisiera darle un buen ejemplo", explica.
Lea también - Jon Rahm, campeón del US Open: reencuentro con sus padres y celebración con su mujer y su hijo en un día especial
"Ahora con mi hijo en mis brazos no dejo de pensar en qué es lo que quiero ser. Y eso pasa por ser un referente del que él puede estar orgulloso. En general creo que he experimentado un pequeño cambio que me ha ayudado a ser mejor persona, mejor padre y hay veces que hace falta algo así para vivir estos cambios. Entonces hay que decir adiós al Rahm de los enfados y bienvenido al más cerebral", añade el golfista.

En la charla con el medio, Rahm también cuenta cómo es su día a día con su hijo y su esposa: "Sigo siendo muy hogareño y estoy en casa con Kepa, ayudo a Kelly... No puedo hacer mucho más que cambiar pañales e intentar que se duerma, porque todo lo demás lo hace ella. Pero sobre todo me encanta pasar el tiempo con él, egoístamente es por mí. Disfruto mucho teniéndolo en brazos".
La llegada del pequeño ha cambiado algunas costumbres de Jon: "Me obliga a tener un horario de vida más organizado, lo cual es bueno; lo demás no varía. Si acaso, que, después de entrenarme en el club, antes me quedaba a tomar algo con los amigos y ahora digo que me tengo que ir a casa y darle a Kelly un descanso. Son cosas normales cuando empiezas como padre que todo el mundo ha tenido que hacer, y no suponen ningún sacrificio en absoluto", declara.

Rahm también desvela que no se separa de su hijo ni cuando tiene que acudir a los diferentes torneos por todo el mundo: "La idea es que Kepa viaje con nosotros todas las semanas. Somos una familia y para nosotros es muy importante estar juntos. Afortunadamente, el PGA Tour lo tiene muy bien organizado y ofrece guarderías en cada torneo, lo que es un gran apoyo. Y luego, cuando cumpla los cinco años y tenga que ir al colegio, pues nos lo volveremos a plantear", dice.

Por último, Jon cuenta cómo vivió el momento en el que sus padres conocieron a su hijo: "Pues con un poco de tristeza porque, cuando ellos llegaron a Arizona, yo todavía era positivo de Covid y no les pude ver. Me perdí el momento en el que mis padres conocieron a mi hijo y eso es lo que más pena me dio. Pero luego todo fue una fiesta", remata.