Mila Ximénez ha fallecido este miércoles a los 69 años víctima de un cáncer de pulmón que le fue diagnosticado en junio de 2020. Tal y como ha desvelado su hermano, Manolo, la periodista ha sido consciente en todo momento de los acontecimientos y ha comunicado sus últimos deseos a la familia: ser incinerada y descansar junto a su hija Alba.

Este miércoles por la tarde, el padre Ángel, muy amigo de Mila Ximénez, dedicará una misa en honor a la periodista en el tanatorio de la M-30, donde descansan sus restos mortales. El jueves será incinerada en el cementerio de la Almudena y sus cenizas, tal y como era su deseo, serán entregadas a su hija Alba, que las llevará con ella a Ámsterdam, donde vive con su marido y sus dos nietos.

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Alba ha sido el principal apoyo de Mila en los últimos meses. A pesar de la distancia, la joven empresaria viajaba siempre que podía a Madrid para apoyar a su madre, que la adoraba. Hace ya una semana que realizó su último viaje y no se ha separado de su lado en ningún momento. Este miércoles, Alba llegó al tanatorio vestida de negro y ocultando su rostro tras unas grandes gafas de sol y mascarilla. Apoyada en su tío Manolo, era incapaz de pronunciar una sola palabra.

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