La hija de Rocío Jurado ha regresado este miércoles a televisión para conceder una entrevista en directo tras la emisión de 12 capítulos de su docuserie, Rocío Carrasco: contar la verdad para seguir viva: "Creo que tengo que cerrar este ciclo y contestar muchas cuestiones", dijo hace unas semanas.

Rocío Carrasco, vestida con un original traje de chaqueta en blanco estampado de corazones negros, se ha mostrado emocionada: "Estoy bien, pero nerviosa. Agradecida y orgullosa de la gente con la que me ha tocado trabajar, estoy orgullosa de ti, de mi país, de las mujeres y los hombres de mi país. Yo he tenido la oportunidad de alzar la voz pero muchas no la tienen, las valientes son ellas". Tras doce semanas de emisión, Rocío se siente liberada: "Estoy serena, he recolocado mis pensamientos, mis vivencias, estoy esperanzada con que después de haber hecho este esfuerzo tan grande, en que la justicia me acompañe y vaya conmigo de la mano. Y que ese esfuerzo que hemos hecho muchos sirva para algo".

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Y ha añadido: "Mi intención no era ser abanderada de nada, pero ahora lo soy con gusto. Me asustaba crear unas expectativas y defraudar, pero llegados al día de hoy, estoy contenta. Me muero por aprender a ser feminista y por aportar más granitos de arena".

El padre de sus hijos, ese "ser"

En relación a Antonio David Flores, el padre de sus hijos, ha desvelado: "Decir su nombre me provoca miedo, prefiero no decirlo. Me provoca dolor... muchas cosas demasiado malas como para nombrarlo y pensar en él. Yo he soltado lastre con este documental y he vaciado la mochila".

Sobre Ro y Da: "Lo he hecho todo con la mejor intención"

Acerca de sus hijos, Rocío y David Flores, aún se siente confusa: "Es difícil contestar a si me siento más cerca de mis hijos, porque ni si quiera yo lo sé", ha dicho entre lágrimas. "Al menos me siento en paz conmigo misma y me siento liberada, escuchada, creída, y para mí es el principio de algo importante, una nueva vida sin miedo. Me hubiera gustado dejarles a mis hijos otro legado que no fuera este, pero era necesario que lo supieran. Ahora que tomen las decisiones que crean oportunas, pero que lo hagan ellos, no nadie en su lugar con mentiras". No tiene miedo a las consecuencias que pueda tener su testimonio: "Cuanto menos pueden pensar lo que ya pensaban antes de mí, si pueden pensar un poquito mejor ya tengo algo ganado. Yo lo he hecho todo con la mejor intención del mundo, les sobreprotegí, guardé silencio para no hacerles daño con la verdad, para mí era más importante sus mentes que la realidad. Se hubiesen dado cuenta desde muy pequeños de la clase de padre que tenían, eso les iba a hacer daño y yo no quería".

Volver a Chipiona: "Fue difícil"

Rocío no dejaba de tocarse el anillo de su madre: "Me da mucha seguridad, la siento conmigo todo el rato". Gracias a la grabación de Mediaset, Carrasco volvió a Chipiona tras 15 años de ausencia: "Yo no tenía fuerza, no estaba preparada. Yo hice mi duelo y sé que la he perdido, pero el hecho de ir allí, a mi pueblo, después de tantos años, ha sido un momento muy duro y no me pude enfrentar antes porque no tenía fuerzas. Estoy contenta de haber ido".

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