Más palos para Blas Cantó, representante de España Eurovisión, tras su pésimo puesto en el certamen de música europeo. Si Alfonso Ussía le ha calificado de "juglar de la extrema izquierda, jilguero podemita, ruiseñor de Belarra y chochín de Irene Montero", ahora es Ramoncín el que se ha despachado a gusto contra el tema elegido por el cantante, Voy a quedarme.
El murciano quedó antepenúltimo y tan solo recibió seis puntos. Ramoncín considera que el resultado final es debido sobre todo a la canción elegida. Para él, es "un espanto" para este festival: "No era el sitio".
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"Primero hay que decir que es un festival de las televisiones de cada país. Blas Cantó representa la Televisión Española, no está representando a España ni a nada que se le parezca", explicó el artista en Liarla Pardo.
Ramoncín tenía claro quién iba a ganar en cuanto escuchó a los italianos: "Pensé que iban a ganar los italianos en cuanto el público se pusiera a votar". El cantante recordó que el grupo italiano "hace tres años estaba en la calle" y atribuye su triunfo a que "eran descarados" y cantaban rock en italiano.
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