Norma Duval vive uno de los momentos más tristes de su vida tras la muerte de su madre, Purificación Aguilera, quien llevaba un tiempo muy delicada de salud por culpa del Alzheimer que padecía hace más de diez años. Una vez llegado el trágico final, la vedette, que estaba volcada en su cuidado, ha despedido a su progenitora rodeada por sus familiares y amigos.

Norma ha enterrado a su madre en la mañana de este mismo martes en el cementerio madrileño de San Isidro, donde ha estado acompañada en todo momento por su pareja, Matthias Kuhn, que se desplazó desde Mallorca en cuanto conoció la noticia del fallecimiento, por sus tres hijos, Marc, Yelko y Christian, fruto de su matrimonio con el jugador de baloncesto croata Marc Ostarcevic.


Hasta el cementerio también se han desplazado Andrea y Paula Paredes, las hijas mellizas de la fallecida Carla Duval, que llegaron abatidas y acompañadas por su primo Christian para despedir a su abuela. Las jóvenes han sido criadas por Norma, quien se hizo cargo de ellas cuando su madre murió el 31 de octubre de 2010. En la casa también residía Purificación.


La actriz ha tenido unas bonitas palabras para su madre: "He podido disfrutar de ella y estar con ella, pero ya estaba muy delicada los últimos años, sobre todo el último año ya estaba muy delicada".
De esta forma, visiblemente emocionada, ha señalado que "se ha ido tranquila, rodeada de su familia y como ella quería. No hemos podido hacer más, hemos hecho todo lo que hemos podido". Como para cualquier hija, es una gran e irreparable pérdida: "Mi madre era muy importante para mí".
Así las cosas, asegura que su familia ha estado con la matriarca hasta el último momento: "La han mimado mucho. Toda la familia, todos la han querido. Y las chicas que la han cuidado, todas la han querido, maravillosas, con un cariño enorme".
Al mismo tiempo, ha desvelado la causa de su muerte: "Fue un paro cardíaco respiratorio, o sea que es el corazón que ha dejado de funcionar". También acarreaba otros problemas: "Ha tenido una enfermedad muy larga, el Alzheimer es muy duro".
Por último, otras tiernas palabras hacia Purificación: "Mi madre se ha ido pero como se tenía que ir. Con su familia, con mucho amor y hemos hecho todo lo que hemos podido y nada más. Gracias", ha sentenciado.