La relación entre Iker Casillas y Sara Carbonero podría estar pasando por sus peores momentos tras más de diez años de amor sólido e inquebrantable. El regreso a Madrid del matrimonio y sus dos hijos, Martín y Lucas, parece haber coincidido con una crisis sentimental cuyo final aún no está escrito.
Aunque tanto Iker como Sara guardan silencio y siguen llevando con extrema discreción su matrimonio, lo cierto es que periodistas cercanos a la pareja, incluso algunos que se hacen llamar amigos, apuntan a una situación muy complicada entre ambos. Incluso llegan a decir que su matrimonio "pende de un hilo", tal y como cuenta El Español.
Estos rumores parecen ir en consonancia con la información que aportó Miguel Ángel Nicolás en Ya es mediodía Fresh antes de las Navidades. "Sara está arreglando su casa de la Finca y él la suya de Pintor Rosales", dijo el tertuliano, dejando entrever una nueva vida en casas separadas.
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Los duros acontecimientos que han vivido Sara e Iker en los últimos tiempos podrían haber hecho mella en su matrimonio. Mientras que Iker sufrió un infarto el 1 de marzo de 2019, a Sara se le detectó un cáncer de ovario semanas después. Ambos se centraron en sus respectivas recuperaciones y Casillas entonó el 'mea culpa' en agosto de 2020: "No he estado con Sara todo lo que debería", dijo a Semana.
Las palabras de Iker parecían anticipar la crisis que vive el matrimonio, según personas de su entorno. La ausencia de imágenes juntos y de interacción en las redes tampoco ayuda a mitigar los rumores. En las últimas horas, eso sí, Casillas ha presumido de un regalo que el grupo Despistaos les ha enviado tanto a él como a su esposa, un gesto que no despeja las dudas, pero que muestra que no todo está perdido, ni mucho menos.
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