El pasado día 22, desde Informalia recogíamos la noticia sobre la escapada a Roma de Dolores Delgado y Baltasar Garzón. La ex ministra y fiscal general del Estado, y el ex juez de la Audiencia Nacional fueron retratados juntos en el aeropuerto de Fiumicino de la capital italiana, en una sala de espera, antes de regresar a Madrid en un vuelo de Iberia. Las imágenes difundidas por Libertad Digital no evidenciaban por otra parte que hubiera algo más que una gran amistad entre los protagonistas de la historia, si bien se intuía una gran complicidad entre Garzón y Delgado.
Pero este sábado, El Mundo va más allá y recoge una fotografía de la ex ministra de Pedro Sánchez y el que fuera magistrado de la Audiencia Nacional, de cena, a solas, en el Trastévere. Y hay más: el periódico recoge el testimonio de comensales que fueron testigos de la velada. El titular es éste: "No era una cena de trabajo, la calificaría de romántica por la actitud de ambos y sus miradas, incluso él, en un momento de la velada, le tomó una mano tiernamente y se la besó", dice el turista que en el citado medio. "Me chocó el detalle de que, pese a ser una zona muy concurrida, ella fuera cogida de su brazo, como si no le importara que les descubrieran", relata.
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La amistad de Dolores Delgado (57) y Baltasar Garzón (65) comenzó al menos hace 25 años, cuando ella, fiscal treintañera, llegó a la Audiencia donde el jienense ejercía como fiscal antidroga. Ella se separó en 2018 de Jordi Valls Capel, alto ejecutivo de El Corte Inglés y retratista de paisajes urbanos. Se casaron en 1986, mientras ella preparaba su oposición a fiscal. Baltasar Garzón Garzón sigue oficialmente casado con Rosario Molina, profesora de biología con la que contrajo matrimonio hace 40 años y es madre de sus tres hijos María, Baltasar y Aurora, que le han hecho abuelo. Fue ella la que estuvo al lado del ex juez cuando el pasado mes de marzo el ex juez estuvo muy grave por coronavirus.
La comentada relación del ex comisario Villarejo con Garzón, a punto estuvo de costarle el puesto a Delgado cuando era ministra. Ella había negado tener nada que ver con el ex policía ahora encarcelado, cuando se filtró un audio de 2009 de una comida suya en Rianxo con Garzón y Villarejo en la que la entonces titular de Justicia tildaba al ministro de Interior Grande Marlaska, de "maricón".
Otro episodio destacable en la larga historia que une a Garzón y a la actual Fiscal General fue la famosa cacería en la finca jienense de Navaltoro, en 2009, donde ambos coincidieron. Aquella cacería desencadenó la dimisión del ministro de justicia de Zapatero, Mariano Fernández Bermejo.
Tras ser inhabilitado por el Supremo en 2012 por prevaricación, al grabar ilegalmente conversaciones de los cabecillas de Gürtel con sus abogados, Garzón montó un bufete, Illocad.
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