Enrique Ponce y Ana Soria regresaron a última hora de este sábado a Madrid tras su sonado viaje a Francia. El torero y la estudiante de Derecho volvieron haciendo planes por separado. Mientras que la almeriense disfrutó este domingo de un agradable día de playa, el todavía marido de Paloma Cuevas estuvo jugando al golf en compañía de un buen amigo.

Los dos hicieron testigos a sus seguidores de sus planes a través de Instagram. La joven de 22 años compartió un vídeo mientras contemplaba el oleaje del mar y una foto mientras disfrutaba de un refresco junto a uno de sus inseparables amigos. El torero, por su parte, presumió sus dotes con los palos de golf. Tan bien parece que lo estaba haciendo que el amigo que lo grababa lo elogió con un "Que bien la has tocado macho".

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Ana Soria hizo las maletas el pasado viernes para acompañar a su chico en su última faena hasta la fecha, que tuvo lugar el pasado viernes en Nimes, Francia. La estudiante tuvo un bonito detalle con el diestro minutos antes de comenzar la corrida, pues descolgó su teléfono móvil para hacerle una llamada desde el tendido. De esta manera los dos se pusieron a hablar como si de dos adolescentes se tratara. Con esto nos demuestran que no pueden estar ni un solo minuto sin verse ni hablarse, pues el amor nos está dejando ver a un Ponce que nunca habíamos conocido.

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Después de la corrida, los enamorados pasearon por las calles de la ciudad de Nantes. Regresaron a Madrid a última hora del sábado, cuando fueron captados por los paparazzis en el Aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez. Los dos evitaron responder a las preguntas de la prensa mientras portaban sus maletas y caminaban hacia la salida ignorando las miradas indiscretas. 

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