César Alierta se recupera después de estar en coma y tras sufrir dos infartos seguidos. Por fortuna, el que fuera presidente de Telefónica entre 2000 y 2016, ha salido ya de la UCI y su estado mejora, como ya adelantó elEconomista. A sus 75 años, ha logrado esquivar este más que complicado problema de salud.
Una víctima colateral de este serio percance sufrido por el multimillonario zaragozano ha sido Isabel Sartorius, cuya preocupación ha sido constante y muy grande. Desde su entorno nos aseguran que ahora "respira tranquila" pero que "lo ha pasado mal". La que fuera novia de Felipe de Borbón, "se aferra", según nos dicen, al que considera "el hombre de su vida", después de una historia sentimental llena de idas y venidas. Y quiere estabilidad.
Y es que, a sus 55 años, la hija de los Marqueses de Mariño, víctima colateral de la grave situación por la que ha atravesado Alierta, ha vivido "con extrema tensión" la convalecencia del magnate.
Isabel Sartorius ha enamorado a príncipes y empresarios pero hasta que Alierta ha llegado a su vida nunca ha conseguido un final feliz de cuento de hadas. Tal vez la complicada relación que vio entre sus padres haya influido. Vicente Sartorius Cabeza de Vaca e Isabel Zorraquín se separaron. Isabel viajó poco después a Lima, donde su madre se casó de nuevo con Manuel Ulloa, quien llegó a ser primer ministro de Perú (1980-1982). Incrustada en la altísima sociedad limeña de los primeros años ochenta, estudió en el colegio bilingüe de las Dominicas y en el Saint Chaumon. Luego residiría en Washington, donde comenzó sus estudios universitarios en la Georgetown (la universisidad de don Felipe de Borbón) y en la American University. Licenciada en ciencias políticas, trabajó en la sede de Naciones Unidas en Nueva York, hasta que en 1987 regresó a su Madrid natal, donde se instaló con sus hermanos Cecilia y Luis. Dos años después saltaría a los medios su noviazgo con el hijo de don Juan Carlos y doña Sofía. Desde entonces es y será 'la ex novia del Rey'.
La relación entre el multimillonario Alierta y Sartorius surgió hace tres años, en 2017, cuando ambos participaron en un viaje filantrópico de la Fundación Telefónica a África. En ese momento el maño estaba emocionalmente muy afectado por la muerte de su esposa Ana Cristina Placer, acaecida dos años antes.
No fue un principio sencillo el de Isabel Sartorius con el empresario, incómodo entre otras razones por la presión mediática que suponía estar unido a una mujer que, desde que mantuvo relación con el actual jefe del Estado, se convirtió en objetivo de las revistas del corazón.
Nos dicen que la relación a fecha de hoy continúa, que Isabel ha visitado a su pareja, pero que seguirán como están, es decir, sin irse a vivir juntos. Isabel comparte la magnífica casa del madrileño barrio de Chamberí, donde vive alquilada, con su hija Mencía Fitz James Sartorius, fruto de su relación con Javier Soto.
Mencía regresó hace año y medio de Estados Unidos, donde estudió su carrera de Relaciones Internacionales en la Universidad de Georgetown, la misma de su madre y también de don Felipe. Es asimismo la universidad elegida por miembros de la realeza como la princesa Talita von Fürstenberg, nieta de la diseñadora Diane von Fürstenberg; o el príncipe Constantino de Grecia, hijo de Pablo y Marie-Chantal de Grecia.
La joven, de 23 años, inició hace cinco una relación con Adil El Assir, el hijo pequeño de María Fernández Longoria y Abdul Rahman El Assir, empresario libanés y amigo del Rey don Juan Carlos.
Hace dos años, Mencía intervino como becaria en la película Todos los saben, del cineasta iraní Asghar Farhadi, protagonizada por Penélope Cruz y Javier Bardem. La productora Morena Films es de Álvaro Longoria, que además de familiar de la madre de su novio, es amigo tanto de Isabel Sartorius como de Javier Fitz-James.
Mencía residió en Washington entre 2015 y 2019, pero llevaba estudiando en el extranjero desde que cumplió nueve años. "Estoy agradecidísima por esa posibilidad. Ahora tengo amigas en todo el mundo, incluso en África. Creo que mis padres fueron muy valientes mandándome fuera desde que tengo nueve años", señalaba Mencía cuando llegó a la mayoría de edad en una exclusiva junto a su madre vendida a la revista Hola, la publicación de cabecera de Isabel, donde trabajó gracias a su experiencia como coaching emocional. En su momento se dijo que aquel reportaje no le hizo mucha gracia a su padre, el conde de Montalvo. Heredera de la belleza de su madre, en su entorno definen a Mencía como una chica estudiosa e inteligente.

Pese a ser un desconocido para muchos, Adil El Assir puede presumir de haberse codeado con grandes personalidades de dentro y fuera del país. Su padre es Abdul Rahman El Assir, quien ha mantenido siempre una gran amistad con las altas esferas de la sociedad. Es el caso del Rey emérito, don Juan Carlos, con quien el empresario español de origen libanés mantiene una estrecha relación. Tanta que Don Juan Carlos le llegó a invitar al enlace de los actuales reyes, aunque finalmente no asistió.
Abdul Rahman El Assir estuvo casado en primeras nupcias con Samira Kashoggi, primera mujer de Mohamed Al-Fayed y madre de Dody Al Fayed, el amante de Diana de Gales, que falleció con ella en el trágico accidente del Puente del Alma, en París el 31 de agosto de 1997.
Abdul Rahman El Assir, el padre del novio de Mencía, posteriormente contrajo matrimonio con María Fernández Longoria, hija del ex embajador de España en El Cairo, Carlos Fernández Longoria de Pavía, y de quien, tras 28 años de matrimonio y tres hijos en común (Alia María, Khalia y Adil) se separaba recientemente.
La hermana de Adil, Khalia, saltó a los medios hace años, cuando fue considerada una de las solteras de oro y empezó a aparecer en revistas de moda y a escribir en blogs. Pero el nombre de Abdul Rahman El Assir se ha escrito sobre todo en noticias relacionadas con la compraventa de armas. También es muy conocido en Marbella donde se relacionó entre otros con la familia de Agag, el yerno de José María Aznar. Por cierto, Abdul acudió a aquella memorable boda de El Escorial, la que desposó a la hija del ex presidente del Gobierno y Ana Botella con Alejandro Agag.
La relación de Mencía con la prensa del corazón no ha sido sin embargo como la de su madre. La joven, a pesar de aquella portada en Hola, conoce las penalidades de su madre como objetivo de paparazzi. No le gusta la fama de Isabel Sartorius, protagonista de las revistas del corazón con sus idas y venidas sentimentales. Recordemos que Sartorius, llegó a trasladar su residencia a Londres, pero no le sirvió de nada. Allí la fotografiaron con la pandilla de la actriz porno Koo Starr o con José María Cano, de Mecano.

A su vuelta a Madrid, vivió su romance más polémico con Javier Soto, con quien nunca se ha confirmado si se casó o no como publicó en su momento la revista Hola. Tras el nacimiento Mencía en 1997, Javier intercambió el orden de sus apellidos para ser Fitz-James Stuart. Luego él se casaó con María Chávarri, hermana Marta Chávarri, que en los 90 ocupó portadas célebres del corazón.

Sartorius más tarde mantuvo relaciones con Fernando Ballvé. Isabel llegó a la vida de Fernando Ballvé, dueño de Campofrío y Telepizza, cuando este millonario padecía un cáncer de piel que derivó en metástasis y le produjo la muerte en 2009. La relación había sido complicada y tuvo desagradables consecuencias para Isabel. Ballvé había avalado con 200.000 euros a Sartorius en la creación de su firma de bolsos (que acabó fracasando). Sandra Macaya, la viuda del empresario, reclamó los 200.000 euros de sus hijos a Isabel ante los tribunales. Más tarde con el hermano del actor Francis Lorenzo. También estuvo con Isak Andic, el creador del imperio de Mango, coleccionista de arte y una de las grandes fortunas de España.

Tampoco ha sido triunfadora en el plano laboral. Falló como empresaria de bolsos, no llegó a cuajar como colaboradora televisiva. Ahora ha logrado centrarse, con el apoyo de Alierta, trabajando, al parecer y según fuentes de la propia Fundación, de forma externa, para Profuturo, presidida por César Alierta.

Lejos queda aquel verano de 1989 en Palma de Mallorca, cuando Hola publicó unas imágenes del entonces Príncipe de Asturias con una joven cuatro años mayor que él. Aquella rubia de ojos verdes, hija de los Marqueses de Mariño, divorciados, que había pasado su adolescencia en Perú, y estudiado en Estados Unidos, ya había sido por entonces novia de Riky Fuster, amigo del Príncipe.
