Iñaki Urdangarin ha vuelto a su labor como voluntario en el Hogar Don Orione (Madrid) tras un mes sin poder acudir allí. El motivo fue el rebrote de coronavirus que se produjo en el centro y que obligó al marido de la infanta Cristina a someterse a una PCR que dio negativo.
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El cuñado de Felipe VI no tuvo contacto directo con ninguna de las diez personas del centro que sí dieron positivo y eran asintomáticos, pero este rebrote le obligó a interrumpir su voluntariado en el Hogar Don Orione, lugar al que acudía varias veces a la semana desde la cárcel de Brieva, en Ávila.

Por fortuna, la situación en el centro ha mejorado y este miércoles ya pudo retomar su actividad. Se trata de una gran noticia para Iñaki, ya que allí se siente muy bien y ejerce como monitor deportivo de personas discapacitadas, labor que le llena y de la que se siente muy orgulloso.
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En las imágenes, Urdangarin aparece entrando en la residencia con un look muy deportivo, con sudadera gris de capucha, pantalones cortos oscuros y chanclas. En su hombro luce la bolsa ecologista que ya ha llevado en otras ocasiones.
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