Adele es una de las famosas que está en boca de todos estas últimas semanas. La cantante sorprendió a todos sus seguidores cuando presumió de su cambio radical en las redes sociales, pues en los últimos meses habría perdido nada más y nada menos que alrededor de 60 kilos. Su pérdida de peso nos ha hecho recordar a otros famosos internacionales que han sorprendido con cambios tan asombrosos como el suyo.

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La artista británica compartió a principios de mayo una imagen en Instagram para celebrar 32 cumpleaños. En la fotografía se apreciaba su cambio radical, que para nada recuerda a la joven tímida de 19 años, con pelo castaño y mejillas sonrosadas enmarcadas por un frondoso flequillo que conocimos en 2007.

La actriz Rebel Wilson, protagonista de la criticada película Cats, decidió dar un cambio radical en su aspecto físico y a principios de año ya había perdido unos 25 kilos. Para conseguirlo, cambió sus hábitos alimenticios por una dieta mucho más saludable y practica deporte cada día con la ayuda de un entrenador personal, Jono Castano, muy popular en Australia.

En el otro lado del charco también encontramos a la popular presentadora Oprah Winfrey, que en estos momentos sueña con entrevistar por primera vez al príncipe Harry y Meghan Markle tras su escandalosa salida de la realeza británica. La comunicadora perdió hasta 20 kilos en desde 2015 a 2018 gracias al sistema Wight Watcher, que recomienda hábitos saludables y está muy de moda entre nuestros famosos. 

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John Goodman es una de las estrellas de Hollywood que por exigencias del papel no se pudo someter a dieta siempre y cuando le hubiese gustado. El afamado actor de películas como El gran Babe o El gran Levowski ha llegado a pesar 180 kilos, perdiendo en los últimos años hasta 50 kilos.

Jonah Hill también sufría de problemas con su peso, alcanzando hasta los 113 kilogramos. El actor decidió dar un cambio radical en la entrada del 2010 y en 2011 ya perdió hasta 40 kilos. No obstante, el cine le requirió engordar de nuevo en 2015, aunque posteriormente se quitó los 20 kilos de más con mucha facilidad.

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Otro actor que también tuvo que cambiar en varias ocasiones sus hábitos para lucir más o menos peso es Christian Bale. En películas como American Phycho, Batman Begins, The Fighter, La gran estafa americana o El maquinista lo hemos visto lucir asombrosos cambios físicos.

Lo mismo le pasó a la reciente ganadora del Oscar Renée Zellweger, que para El diario de Bridget Jones (2001) y Bridget Jones: Sobreviviré (2004) tuvo que engordar bastantes kilos hasta parecer otra completamente nueva. Otros actores que cambiaron de aspecto por exigencias del guion son Chris Hemsworth, Matt Damon, Michael Fassbender, Matthew McConaughey o Adam River. 

Otro de los casos más sonados fue el de la cantante Jennifer Hudson, ganadora de un Oscar por Dreamgirls en 2006 por Mejor Actriz de Reparto. La que fuera finalista del popular concurso American Idol en 2004 perdió en 2010 más de 35 kilos gracias a duras jornadas de ejercicio como las de Adele y a seguir una dieta mucho más saludable.

Los mismos kilos perdió el actor Chris Pratt en 2011, que se enfrentó a algún que otro contratiempo cuando estuvieron a punto de no escogerle en la película Moneyball por su peso. Por aquel entonces aseguró que perdió kilos gracias al deporte, la dieta saludable y también a dejarse al alcohol. También reconoció que bebía mucha agua desde bien temprano, hasta el punto de que tenía que dejarse caer por el baño hasta en tres ocasiones antes de las 10 de la mañana. 

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